Por expreso pedido del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, ayer partieron dos autobombas con miembros de la Brigada Forestal de la Subsecretaría de Defensa Civil de la provincia de Salta al departamento San Miguel, en la provincia de Corrientes. El el propósito es sumar recursos operativos y humanos en las tareas de sofocación de los incendios.
En esa provincia del Litoral argentino el fuego ya consumió más del 9% de su territorio, a lo que hay que sumar millonarias pérdidas de flora, fauna y producción. Es por esto que se declaró la emergencia ígnea a nivel nacional y comienza a llegar ayuda llega de todos los estamentos estatales, nacionales, provinciales, e incluso internacionales, como las brigadas y equipos que enviaron Bolivia y Brasil.
En el caso de Salta, el pedido del Servicio Nacional de Manejo del Fuego fue puntualmente el envío de dos autobombas propiedad de la provincia con miembros de la Brigada Forestal “para cooperar con las tareas de sofocación en los distintos departamentos correntinos”, dijo a Salta/12 el subsecretario de Defensa Civil, Jorge Arce.
El Servicio Nacional de Manejo del Fuego, dependiente del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, es un organismo encargado de la coordinación de los recursos requeridos para el combate de incendios forestales, rurales o de interfase, y tiene a cargo las acciones de manejo del fuego en todo el país.
Los vehículos 4x4 permiten el ingreso en caminos de difícil acceso, fueron acompañados de sus respectivos conductores “y dos jefes de cuadrilla”, que estarán al servicio de las autoridades nacionales donde está instalado el Centro de Coordinación. “Sabíamos que en cualquier momento nos podían requerir ayuda por eso ya estaba todo alistado”, indicó el funcionario quien agregó que también preparan al personal en el caso que sea necesario.
Arce explicó que en estos casos se toman medidas de manera escalonada y que, como ya se sumaron muchos brigadistas, lo que están necesitando es equipamiento “al trabajar con tantos focos a la vez, y grandes, hay que ver bien cómo se coordina con la parte aérea, los brigadistas que van a estar en terreno y los autobombas”.
Arce no se animó a señalar una causal de los incendios, en parte porque “la geografía de Corrientes es muy distinta a la de Salta”, por lo que el comportamiento del fuego “se hace totalmente distinto”. Aseguró también que hasta que no se extinga no se podrá determinar con certeza cómo se iniciaron los focos ígneos.
De todas maneras, recordó que el 95% de los incendios forestales “son creados por la mano del hombre, ya sea por negligencia o con intención”, entre las que destacó las prácticas ancestrales de quema de pasturas.
Tampoco consideró que se haya demorado en actuar, aunque repitió que “todo se sabrá cuando se pueda extinguir y se estudien las causales. Se está trabajando mucho, hay muchísima gente y están todos los medios disponibles en el lugar”, destacó.
Sin embargo, el especialista aclaró que para mitigar el fuego se necesitará, además de los medios humanos, una ayuda de la naturaleza, algo que llegó el último domingo con lluvias y descenso de la temperatura, “no sofoca tanto el fuego pero sí permite que el trabajo de los brigadistas sea más eficiente porque las temperaturas no son tan altas”, dijo el funcionario.
Salta está preparada
Según Arce, Salta ya tiene experiencia en incendios y posee un equipo preparado y con equipamiento adecuado. Defensa Civil cuenta con dos cuadrillas de la Brigada Forestal de Incendios, siete camiones autobomba 4x4 y camionetas de “ataque rápido” que logran ingresar donde no llegan los camiones.
El subsecretario destacó también que la provincia posee muchos cuarteles de Bomberos Voluntarios, que se suman al combate de los incendios forestales en todo el territorio, “están capacitados, trabajamos en conjunto y coordinados con los de la Policía, los Voluntarios, la Brigada Forestal, a los que se suman los brigadistas de Parques Nacionales y provinciales”.
Ese trabajo coordinado, para el funcionario, permitió bajar el porcentaje de hectáreas quemadas en los últimos años. Mientras en 2020 fueron 40.000, “en su mayoría ubicadas en el Parque Nacional Calilegua de la parte salteña, entre Urundel y Santa Rosa”, en 2021 se bajaron a 15.000, “lo que significa que por un lado el trabajo de prevención es fundamental, pero también esa coordinación con todos los que participan del sistema de incendios forestales hizo que podamos bajar las hectáreas quemadas”.
Ante la consulta sobre la presencia de aviones y helicópteros hidrantes que en otras épocas se veían con más frecuencia, el funcionario respondió que la provincia cuenta con dos helicópteros hidrantes “a disposición siempre”. Pero además, por integrar el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, durante la temporada alta de incendios, que comprende de junio a diciembre, el Noroeste Argentino cuenta con aeronaves hidrantes pertenecientes a ese Servicio Nacional, “a veces están en Catamarca, otras veces en Salta o en Jujuy, de acuerdo a la necesidad”, explicó.