Alrededor de 70 árboles que formaban parte de la traza de la avenida Paseo Colón fueron talados como parte de las obras del Metrobus del Bajo, denunciaron entidades vecinales que consideraron como "innecesaria" la medida llevada adelante por el Gobierno de la Ciudad. Por eso, como rechazo a la "tala masiva", convocaron a una protesta para mañana a las 18, en la esquina de Paseo Colón y San Juan, con la consigna #Sinárbolesnohayvida.
Los ejemplares de fresno, jacarandá y eucalipto fueron retirados en el tramo comprendido entre las avenidas Independencia y Brasil, frente al Parque Lezama, detallaron vecines, quienes añadieron que algunos de esos árboles eran añosos pero otros habían sido plantados recientemente. Además, responsabilizaron al Gobierno porteño de "atentar contra el bienestar de los ciudadanos con esta masacre que están haciendo", dado que la falta de esos árboles acarreará un perjuicio ambiental para la zona, aseguraron.
Una obra que requirió demoler edificios históricos
La obra de extensión del corredor exclusivo para colectivos comenzó en octubre de 2021 y está en plena ejecución. La segunda etapa del Metrobus del Bajo tendrá una extensión de casi dos kilómetros y llegará a San Telmo y La Boca, con 16 nuevos paradores distribuidos en cuatro paradas para las 19 líneas de colectivos que los utilizarán, adelantó el Gobierno porteño.
Para ampliar la cantidad de carriles, se demolieron tiempo atrás dos edificios emblemáticos de la zona situados en el cruce con avenida Brasil: uno, el inmueble en el que funcionó la Escuela Taller del Casco Histórico y el otro, conocido como "Marconetti", construido en 1929.
Este año, la obra avanzó sobre los ejemplares del arbolado urbano, como habá anticipado un informe de prensa del año pasado, según el cual estaba previsto que se incorporaran 105 nuevos árboles a los 380 actuales de la traza, pero a la vez se estimaba que unos 68 se verían afectados o extraídos.
"Nos dejaron sin la protección de los árboles y sin los beneficios para la salud", reclamó María Angélica Di Giácomo, de la organización "Basta de Mutilar Nuestros Árboles". "Queremos que esto se visualice porque judicialmente no podemos presentar ningún recurso de amparo porque las extracciones de árboles son legales cuando son para una obra pública, como es este caso", indicó.
"Lo más grave de todo esto es que para la prolongación del Metrobus no era necesaria ni la demolición de la Escuela Taller ni del edificio Marconetti, como tampoco era necesario talar los árboles porque el ancho de la calle no lo requiere y así está demostrado con una comparación que se hizo con el Metrobus de la avenida Cabildo, en Belgrano, donde no se taló nada", detalló.
"Perdimos suelo absorbente y follaje frondoso", señaló Di Giácomo, y remarcó que "los espacios verdes no solo tienen funciones recreativas, sino también ambientales como la disminución de la temperatura, pero eso no fue tenido en cuenta por el Gobierno de la Ciudad".
"Primero les cortaron las ramas y después avanzaron con la tala hasta dejar la corteza al ras del piso. Es muy triste porque eran árboles con troncos de unos 80 centímetros de diámetro", precisaron desde la organización "Casco Histórico Protege", que registró cada uno de los ejemplares talados en la segunda etapa de obras del Metrobus.