Los videos fueron contundentes: la directora del jardín Coloreando le muerde la mano a una niña pequeña, zamarrea a otro, sacude a varios. Tras la difusión, la Municipalidad puso faja de clausura en la puerta de un jardín maternal de Alberdi, donde ayer se movilizó un grupo de madres y padres. Entre les manifestantes, la sensación era de enojo y angustia. La situación fue advertida por una pareja vecina del maternal, donde la acusada es la propia directora, a quien se ve en las imágenes que llegaron a las familias el fin de semana, por lo que ya el lunes decidieron no llevar a sus hijos e hijas. Además de la intervención de organismos estatales, la denuncia llegó a Fiscalía.

Gritos y malos tratos era lo que se escuchaba a diario desde el otro lado de las paredes que dan al patio del jardín de Chiclana 924, donde asisten alrededor de 30 niños y niñas de entre uno y cuatro años. En las últimas horas se viralizaron videos que pudo filmar una vecina, y que llegaron a madres y padres este fin de semana.

Indignación, malestar y angustia fue lo que manifestaron desde la puerta del jardín madres, padres, abuelas y tías que al enterarse de la situación acudieron al Centro de Asistencia a la Víctima de la Defensoría del Pueblo para pedir asesoramiento y ver de qué manera viabilizar una denuncia. A partir de esa intervención, llegó al presentación a Fiscalía.

La directora del Centro, María Laura Pasquero, indicó que fueron alrededor de una decena de padres y madres quienes le relataron los hechos: “Pude ver algunas imágenes y son realmente escalofriantes. No está bueno naturalizar situaciones que tienen que ver con el deber de cuidar. No está bien zamarrear. No está bien gritar”, señaló en LT8.

Si bien las imágenes grabadas llevaron claridad sobre la situación, varios progenitores comentaron que habían notado marcas como moretones, que eran adjudicadas a los juegos, mientras que otras señales eran menos visibles y se manifestaron con cambios de actitud en les niñes. 

Una de las madres, que llevaba al pequeño de 15 meses al jardín, relató que a su hijo, la acusada lo toma de un brazo para "llevarlo por el aire tres metros. Lo dejó llorando ahí. Eso fue en tres oportunidades, en tres días distintos".

Walter tiene un nene de 3 años. “Realmente estamos conmovidos, con bronca y desilusión. Nos enteramos el sábado porque durante los últimos días de la semana pasada hubo un hecho de extrema violencia y la vecina que filmaba todo no pudo soportar más. Cuando lo vinimos a buscar vimos que tenía una marca en la boca pero siempre nos decía que son juegos. Por eso ahora estamos con una mezcla de sensaciones, masticando bronca y algo de culpa porque nos dimos cuenta ahora observando los videos”, sostuvo.

Además, algunos padres relataron que la directora del jardín solía pedir dinero por adelantado de la cuota, además de materiales y comida para niños y niñas.

Pasquero, remarcó la importancia de "sostener el objetivo de acompañar, porque el proceso penal es, muchas veces, muy difícil de comprender”. Por otro lado, señaló que “los jardines maternales particulares que no están incorporados a escuelas no dependen del Ministerio de Educación provincial sino del área de Habilitación de Comercio de la Secretaría de Gobierno de la Municipalidad. Desde hace tiempo pedimos que la regulación de estos jardines esté a cargo de alguna repartición ministerial, pero no hay autoridad que ejerza contralor acerca de las condiciones de esta persona para estar a cargo de niñas y niños”.

Por su parte, la directora municipal de Infancias, Sonia Colacelli, indicó:  “Cuando fuimos a reponer la faja de clausura, porque había sido violada -la que estaba colocada desde la noche del lunes-, la titular del jardín dijo que dará de baja el mismo". Además, habló de los controles. “El municipio ejerce el contralor de jardines privados a través de varias secretarías y desde esta dirección, supervisando el proyecto pedagógico con la necesidad de que sean, siempre, docentes calificadas las que estén a cargo de un determinado número de niños”, expresó en LT8.

“Hacemos visitas periódicas a estos jardines y en cuanto a este jardín, tenemos las constancias de haber ido cuatro veces en los últimos tiempos -expuso-, pero lo lamentable es que uno puede ir todos los días y observar el desempeño formal docente pero no obtener pistas de estas situaciones. Cuando nos llega un mensaje de un papá o como en este caso, de la Defensoría, inmediatamente disponemos la clausura preventiva, porque lo más preciado es preservar la integridad de los niños. En el caso de los jardines maternales, hay una decisión de los papás que se basa en la confianza y que en este caso se quebró”.

Además, indicó que “anualmente, las personas que trabajan en estos jardines deben acompañar un certificado psicofísico, que hoy en día está muy perfeccionado. Pero estas cosas nos sorprenden siempre, y para mal”.

En tanto, desde Fiscalía indicaron que hoy se tomarán testimonios. Luego, "se analizarán los datos aportados en la denuncia y si son de entidad para el avance en la justicia penal".