La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, aseguró este miércoles, al participar de una conferencia virtual de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que "Sudamérica es la región del mundo con mayor cobertura" contra el coronavirus y que la Argentina "está por sobre la media".

A pesar del acceso inequitativo a la vacuna que existe en el mundo, detalló Vizzotti, la Argentina ya lleva aplicadas 110 millones de dosis y tiene al 80 por ciento de la población inmunizada con dos dosis, "superando así la meta propuesta por la OMS para junio de este año".

Además de los índices de vacunación, el país donó 5 millones de dosis a Asia, Africa, América latina y el Caribe, con la convicción de que "es muy importante ese círculo virtuoso de reciprocidad y de solidaridad para poder avanzar en la vacunación".

La inmunización contra el coronavirus, consideró la ministra, "es un pilar clave no solo para salvar vidas sino además para propiciar una recuperación económica y social más rápida y más justa".

En la presentación de este miércoles, encabezada por el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, Vizzotti también agradeció la decisión del organismo de sumar un nuevo centro de capacitación en las afueras de Seúl, en Corea del Sur, donde unos 370 profesionales de países de bajos recursos recibirán apoyo para producir vacunas, insulina, anticuerpos monoclonales y tratamientos contra el cáncer, entre otros desarrollos.

Esto permitirá "mejorar el acceso equitativo, y sobre todo oportuno" a los medicamentos frente a posibles nuevas pandemias y será, además, "una excelente oportunidad para mostrar cómo pueden contribuir otras naciones del mundo a abordar los mismos desafíos globales", destacó la funcionaria, en alusión a la participación de profesionales de Bangladesh, Indonesia, Pakistán, Serbia y Vietnam.

La Argentina participa desde el año pasado de un iniciativa similar junto con Brasil en un centro en Sudáfrica. En ese marco, Vizzotti recordó que "América latina cuenta con las capacidades esenciales para ampliar la producción local y reducir las brechas en el acceso a las vacunas".

"Si queremos lograr mejores resultados de salud a nivel mundial y a nivel regional, incluida una mejor preparación para futuras emergencias de salud, sin lugar a dudas debemos romper el ciclo de dependencia de nuestra región en un mercado mundial de vacunas altamente concentrado", concluyó la ministra.