La Municipalidad de Rosario clausuró el jardín de infantes "Coloreando", ubicado en la calle Chiclana al 900, en la zona norte de la ciudad santafesina, tras la denuncia de un grupo de madres y padres contra la directora a raíz de los maltratos a los que sometía a niñas y niños, de entre 1 y 4 años y que fueron filmados por una vecina. En tanto, la Asociación de Jardines Particulares de Rosario decidió este miércoles expulsar definitivamente a la agresora.

La Defensoría del Pueblo de la provincia de Santa Fe, a través de su Centro de Asistencia a la Víctima y al Testigo del Delito (CAV), presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público de la Acusación (MPA) contra la directora del jardín maternal, luego de que las madres y los padres de las víctimas concurrieran este lunes al organismo para dar conocimiento de los hechos.

La situación salió a la luz gracias a que una vecina pudo grabar desde su ventana y difundir las agresiones físicas y verbales a las que la directora sometía a las nenas y nenes. En los registros fílmicos, también, se pudo observar "a una de las maestras levantando del brazo un metro a mi hija y tirándola para otro lado", sostuvo el papá de una bebé de 1 año y medio.

Familiares reclamaron frente al jardín maternal

En tanto, los familiares de las víctimas se manifestaron este martes al mediodía frente a la institución educativa para repudiar el maltrato que sufrían sus hijas e hijos todas las mañanas. Según revelaron, aparecieron con rasguños y moretones durante los últimos días, pero no imaginaban que se trataba de un ataque dentro de la institución.

"Realmente estamos conmovidos, con bronca y desilusión. Nos enteramos el sábado porque durante los últimos días de la semana pasada hubo un hecho de extrema violencia y la vecina que filmaba todo no pudo soportar más y denunció", sostuvo el padre del niño de 3 años que aparece en una de las filmaciones golpeándose la boca contra el piso, luego de ser empujado fuertemente por la directora.

"Cuando lo vinimos a buscar vimos que tenía una marca en la boca pero siempre nos decía que son juegos. Por eso, ahora estamos con una mezcla de sensaciones, masticando bronca y algo de culpa porque nos dimos cuenta ahora observando los videos", agregó.

Por su parte, otro papá dijo que en las últimas semanas comenzó a notar algunos cambios en la forma de ser de su hijo, a quien "por momentos le costaba ir al jardín". "Ahora por cualquier cosa que hacen piden perdón y hay chicos que han sufrido retrocesos, que estaban dejando los pañales y ahora volvieron a usarlos", contó.

Asimismo, la mamá de una niña de 18 meses, que desde hace un tiempo no se quiere dejar cambiar el pañal, manifestó: "Era una nena muy sonriente y feliz y empezó a ser más retraída y tímida. En un video se ve cómo le arrancan de la mano un juguete y en otro cómo no le quieren dar galletitas".

Se enteraron gracias a una vecina

Las múltiples agresiones que padecían las niñas y niños que asistían a "Coloreando" salieron a la luz gracias a una mujer que vive en una casa lindante al establecimiento educativo. La vecina pudo capturar con su celular el momento exacto en que la directora empujaba y zamarreaba a los niños mientras jugaban en el patio.

La mujer estaba preocupada por los gritos y llantos de los chiquitos que se escuchaban y decidió registrar la situación con su teléfono. Así, desde su ventana, grabó unos 40 videos de maltrato por parte de las docentes, mientras que además aportó un duro relato de lo que vivían a diario en la institución.

"Un día vi cómo pateaba a una nena en el piso como si fuera una bolsa", detalló la mujer en "De 12 a 14 (El Tres)", y añadió: "Yo había grabado varios videos, pero no eran tan graves. En el último tiempo (la directora) estaba desquiciada, nos despertaban los gritos de ella, les hacía cualquier cosa a los chicos".

La vecina había increpado a la agresora, así lo relató: "Un día fui a hablar con ella porque no soportaba más los gritos y por la ventana vi que zamarreaba a un chico. Ahí no aguanté más, la insulté y le dije que la iba a denunciar. Se me quedó mirando y no me dijo nada", finalizó.