La plataforma estadounidense Airbnb anunció el lunes que ofrecería alojamiento gratuito de corta duración a 100.000 ucranianos que huyen de la invasión rusa. Esos alojamientos serán financiados por la empresa, donantes al fondo de Airbnb para refugiados y anfitriones. Las donaciones tanto de partes de los cobros por rentas de los anfitriones, o por la cesión de alojamientos, se realizan a través de Airbnb.org, una organización sin fines de lucro que tiene vínculos con la Airbnb con fines de lucro.

La empresa madre, Airbnb, dijo estar trabajando con los gobiernos de varios países europeos para acoger a los refugiados ucranianos, incluso en alojamientos de larga duración. 

El director de la plataforma, Brian Chesky, y otros responsables de la firma enviaron cartas a líderes de Polonia, Alemania, Hungría y Rumania.

Desde el comienzo de la ofensiva rusa, unos 400.000 ucranianos ingresaron a la Unión Europea, según un recuento de la AFP. Casi la mitad de ellos llegaron a Polonia, de acuerdo con el gobierno de ese país.

Airbnb ya había ofrecido ayuda en agosto pasado a los afganos que buscaban huir de su país tras la toma del poder por los talibanes. El sitio anunció este martes que había logrado albergar a más de 21.000 refugiados afganos de forma gratuita.

La plataforma se fijó el objetivo de proporcionar alojamiento temporal a otros 20.000 refugiados de Afganistán, África, Oriente Medio, América Central y América del Sur.

La experiencia de brindar alojamiento a refugiados se había desarrollado durante la pandemia, con un sistema similar denominado Frontline, de la misma empresa, para dar alojamientos a situaciones de crisis provocadas por la covid-19 o incluso a integrantes de equipos de salud.

Ya desde 2012 la empresa de la casita había iniciado el ofrecimiento de alojamientos a miles de personas en emergencia por catástrofes naturales o conflictos bélicos, mediante la fundación Open Home, que ahora están integrando al funcionamiento de Airbnb.org