La sociedad anónima con participación estatal mayoritaria REMSa (Recursos Energéticos y Mineros de Salta SA) firmó un acuerdo con la compañía canadiense Portofino para realizar tareas de exploración y prospección en territorio salteño destinado a la investigación de futuros yacimientos, con el fin de atraer nuevas inversiones y participar de las ganancias futuras.

El acuerdo consiste en avanzar con estos estudios en conjunto para determinar si la salmuera u otros minerales extraídos se encuentran en la suficiente cantidad y concentración para justificar algún tipo de inversión en un salar o yacimiento. “De esta forma se certificarán y valorizarán áreas mineras sobre las que hay muy poca o nada de información acerca de sus recursos existentes”, destacaron desde la empresa estatal.

REMSa será una parte asociada al desarrollo del proyecto definitivo minero una vez que se hayan terminado los estudios pertinentes, y se quedará con el 15% de las ganancias de futuras explotaciones. Entre las tareas de exploración no invasiva y la etapa de perforación que se realizará, la inversión será de alrededor de 10 millones de dólares.

A su vez, la multinacional dedicada a la explotación de minerales tendrá otro aliado local que se constituyó como filial argentina de Portofino, la Sociedad de Responsabilidad Limitada RONIALEM, que se quedaría con otro 15% en caso de que esos yacimientos sean explotables y comiencen a producir.

El presidente de REMSa, Alberto Castillo, y el CEO de Portofino, David Tafel, rubricaron el convenio que le permitirá a la firma comenzar con las exploraciones en los próximos días en las 27.000 hectáreas disponibles con las que cuenta la provincia, según informaron desde el área.

Alberto Castillo, en diálogo con Salta/12, contó que esas 27.00 hectáreas quedaron vacantes por el Juzgado de Minas, por lo que por ley le corresponden a REMSa, que puede publicar las áreas vacantes, adjudicarlas, “pero también puede hacer exploración y prospección para determinar el contenido y la concentración de litio u otros metales que hay en esa área”, detalló.

Ese fue el rumbo elegido por la autoridad que conduce, y Castillo defendió la decisión como una medida positiva “porque al meternos en el estudio, sabemos concretamente cuáles son los recursos con los que contamos”, lo que genera “un gran valor de mercado a esos sectores” a la vez que le permite a la provincia controlar y certificar lo realizado en cada área.

Castillo explicó que el llamado a asociarse con el sector privado no es solo para la empresa con la que se logró el primer convenio, sino que está abierto a otros interesados, y se prevé que a través de esa sociedad se “financie esa tarea de exploración”.

Hasta aquí el procedimiento que se realizaba era licitar un área y cuando la empresa ganadora “comenzaba a explorar" se daban cuenta de que "no había nada, o había un montón, y podría haber dejado muchísima más plata para la provincia”, contó el presidente de REMSa. Por esto volvió a defender la decisión de tomar esa opción de participar de la investigación y no ver cómo solo se llevan posteriormente las riquezas naturales locales.

El beneficio que obtendrá la empresa, que comienza a invertir para la investigación exploratoria consiste en que en el momento de licitar el área en cuestión, le otorgarán un rango de puntaje superior entre los ítems, “es una prioridad pero no les da ningún derecho, sino un porcentaje mayor al momento de licitar, porque todas irán a licitación pública”, aclaró Castillo.

Cada área explorada tiene un valor aproximado de 2 millones de dólares, indicó el funcionario, "Eso es lo que se les reconoce”, y en caso de no ser las elegidas para su posterior explotación y producción, la ganadora debe devolver el dinero invertido a quien realizó el estudio.

“Nuestro caballito de batalla es que a partir de ahora, como les damos el beneficio para que sepan qué va a haber, antes de invertir en una planta productiva de 500 millones de dólares, REMSa, en caso de descubrir (minerales), se quedará con el 15% del proyecto”, agregó y acotó que es un porcentaje mucho mayor al que se puede establecer por ley, “REMSa tiene que ser parte de cada uno de los proyectos que se realizan en nuestras tierras”, agregó. Mientras que otras provincias como Jujuy obtienen el 8%.

Castillo relató que no es la primera vez que actúan de esa manera, ya que con Eramine, que anunció hace unos días el inicio de su planta de producción de litio en la Puna salteña, la que estima comience a generar ganancias en 2024, se acordó el 5% del proyecto, que “van a ser $900 millones a partir del 2024”. Lo mismo se hizo con OEM en el Parque Fotovoltaico de Olacapato, en donde la provincia se reservó entre el 2,2 y el 2,3% de la venta de energía a CAMESA.

“El nuevo modelo de REMSa es ser parte de cada uno de los proyectos sin poner un peso”, culminó el presidente de la empresa y volvió a hacer público que en esas 27.000 hectáreas disponibles pueden invertir otras empresas, entre las que está interesada YPF Litio.

En unos 20 días, luego de este compromiso de entendimiento entre la firma extranjera y la empresa estatal, se concretará la firma de contratos “para comenzar cuanto antes con las exploraciones”.

Las propiedades mineras iniciales con potencial geológico que fueron identificadas por REMSA están ubicadas en el corazón del Triángulo del Litio Argentino y muy cerca de otros proyectos de litio. Comocpor ejemplo la de Hombre Muerto Norte, con 3.028 hectáreas, cercanas al proyecto Posco. El salar del Hombre Muerto, el de Pastos Grandes (3.489ha), Arizaro (19.111ha), Incahuasi (722ha), Río Grande y Salinas Grandes (1060ha).

El particular socio local

La alianza que buscó la firma canadiense, y que explorará el territorio salteño se llevó también la atención en la firma del memorando de entendimiento. Es que esa SRL, denominada RONIALEM, está conformada íntegramente por miembros del antiguo staff del ex presidente Mauricio Macri, como el ex presidente de la Cámara de Diputados Emilio Monzo, junto al ex ministro del Interior Rogelio Frigerio, y el también ex diputado nacional del PRO Nicolás Massot. Éste último fue quien se presentó para firmar el convenio junto a las autoridades provinciales y las de la empresa extranjera, y hasta posó para las cámaras.

El acta constitutiva de la Sociedad es de noviembre de 2021, es decir, tiene menos de seis meses de existencia y tiene por objeto “adquirir, mantener y administrar participaciones e inversiones en sociedades constituidas tanto en el país como en el extranjero, de todo tipo, a cuyo fin podrá afectar la totalidad de su patrimonio, incluso convirtiéndose en controlante de las mismas, y cualquiera sea el objeto de las sociedades participadas o controladas”, así como constituir nuevas sociedades, “efectuar aportes de capitales a sociedades existentes o a constituirse para la financiación de operaciones realizadas o a realizarse”.

Nicolás Massot, segundo a la dercha, junto al staff de REMSa y de Portofino

Aunque expresa en sus finalidades que puede afectar “el total de su patrimonio” en inversiones, resulta jocoso descubrir que el capital con el que se constituyó RONIALEM es de apenas que $200.000 “dividido en 200.000 cuotas de $ 1 valor nominal cada una”, de las que cada uno de sus socios debe poner $50.000 en cuotas de $1.

A través de esta sociedad, los tres ex funcionarios de Cambiemos participarán de la exploración como socios de quien invertirá en el país, y a futuro, si es que Portofino avanza con la explotación de alguno de sus yacimientos, podrá disfrutar de los beneficios con un 15% de las ganancias, lo mismo que recibirá la provincia.

El titular de REMSa, Alberto Castillo, aclaró que ni él ni nadie de la provincia realizó ningún vínculo con los socios de RONIALEM, sino que fue la misma firma de Canadá la que se presentó con ellos y los eligió como filial en Argentina “son quienes los representan en el país y con quienes nosotros tenemos que sentarnos”, pero volvió a negar cualquier tipo de vínculo.

“La misma empresa tiene una filial canadiense y una argentina, y aquí está al frente Massot”, sostuvo Castillo, “mientras el procedimiento se cumpla y REMSa obtenga su parte, lo demás será su problema”, declaró despegándose de esa comprometedora presencia de quienes manejaron las riendas del país entre 2015 y 2019 y ahora hacen negocios mineros con la provincia.