Sin tiempo para adaptación, el Turismo Carretera mostró en la primera competencia del año que en la pista se jugará rudo. La reñida definición que dejó herido en la última vuelta al Chevrolet de Agustín Canapino y sirvió la victoria al Ford de Juan Bautista De Benedictis tras un sinnúmero de sobresaltos en Viedma quedó atrás y el ambiente siente la calma del día previo a una cita con 50 anotados que promete desatar un ventarrón típicamente patagónico en el regreso luego de dos años al circuito ubicado en las afueras de Centenario, provincia de Neuquén. La novedad de esta semana es la regla que transforma al evento en una “Carrera Especial”, con la estrategia que plantea la obligatoriedad de detenerse en boxes promediando la Final para cambiar dos neumáticos.
A muchos les tocó rearmar y reparar vehículos, como a Jonatan Castellano y el equipo afincado en Lobería. El trajín de recomponer los daños sufridos en su Dodge por el impacto contra el coche de Canapino en los instantes decisivos de la carrera anterior, aún con dos semanas y media de tareas, se pudo culminar recién en la tarde del jueves. También el arrecifeño tetracampeón entregó la Chevy a los mecánicos del JP Carrera con la necesidad de auscultar en lo íntimo de la estructura tubular para asegurar que no había daños mayores.
En una situación diferente, esperó confiado este fin de semana el primer ganador del año. El necochense De Benedictis, que aseguró la victoria que lo habilita a luchar por el título a fin de año, lidera el campeonato con 4 puntos de ventaja sobre Juan Cruz Benvenuti. Este último jugará de local con su Torino, contando con el valor agregado de ser el último galardonado en el trazado de 4.380 metros. Sólo unos pocos dedicaron una jornada a ensayos privados, como Andrés Jakos con el Toyota, Diego De Carlo con Chevrolet y Emiliano Spataro con su Torino.
El cambio de neumáticos
Esta carrera enciende una energía diferente en los equipos, pues cada integrante toma un papel preponderante. En medio de la carrera se ingresará a boxes para cambiar neumáticos y en manos de los mecánicos se empeñarán entre 18 y 20 segundos vitales para el éxito. Levantarán el coche con un críquet, quitarán las cinco tuercas de la rueda usada para retirarla y colocar la nueva llanta y neumático, devolviendo el auto a la pista en el menor lapso posible. Sin lugar para titubeos, con este proceso se deben reemplazar las dos ruedas del lado derecho del auto durante la Final pautada a 25 rondas y que concede el período entre el 9° y el 20° giro para cumplir con el cometido reglamentario.
Un historial de sorpresas
El breve repaso de este tipo de competencias ha dejado imprevistos desenlaces, como en 2017 cuando Matías Rossi se encontró con el triunfo tras largar noveno porque tomó la oportunidad de un Auto de Seguridad que neutralizó la carrera y recuperó rápidamente el terreno que había perdido con su ingreso a los boxes. En la edición siguiente, Castellano pasó a liderar la carrera cuando superó a Guillermo Ortelli con una milimétrica detención mientras ambos buscaban el caucho nuevo, consagrando el trabajo de su equipo a pesar de los reclamos que hiciera el rival. En tanto, las últimas ediciones bajo esta modalidad, en 2019 y 2020, dieron el triunfo primerizo en TC a Valentín Aguirre (Ford) y el segundo halago personal de Benvenuti, respectivamente.
Toyota, otra vez en la mira
El ingreso de la marca nipona, la primera en sumarse al TC en cuatro décadas, tuvo un modesto desempeño deportivo del modelo Camry con sus pilotos, Rossi y Jakos, por lo que se les autorizaron modificaciones para mejorar el rendimiento. Por un lado, llegan a Neuquén con, aproximadamente, cinco caballos de fuerza extra en el motor al aumentar la medida de un difusor del carburador. Además contarán con un spoiler trasero mayor, que se ha desplazado hacia atrás aumentando la carga aerodinámica con un efecto de ‘palanca’ que apoya el tren trasero firmemente al piso y genera estabilidad.
Pero la realidad actual se verá el domingo con las tres series clasificatorias a 5 vueltas durante la mañana y a partir de las 13:20 con la disputa de la Final ‘especial’ ante un marco de público que promete ser récord, pues los fanáticos están apostados incluso desde antes que se habiliten los portones de acceso. Hasta el momento, los seguidores de Ford celebraron cuatro veces en el trazado neuquino y lideran la estadística de triunfos por encima de Chevrolet (3) y las conquistas de Dodge y Torino (2). Para vivir esto se han preparado los apasionados, esos a los que sólo puede empujar el motor de seis cilindros en línea del TC que volverá a sentirse en la comarca patagónica.