La semana comenzó sin convocatoria a la vista desde la Casa Gris para la paritaria docente, y entonces el sindicato Amsafé ratificó su plan de lucha, y Sadop ya lo había hecho el viernes: hoy y mañana no habrá clases en las escuelas públicas y privadas de Santa Fe, en nivel inicial, primario y secundario. Para colmo, el Gobierno tiró una señal que actuó como nafta al fuego: si no hay acuerdo, aplicarán por decreto el aumento ofrecido y que hasta ahora los docentes han rechazado, y se habrá terminado el asunto. O habrá empezado otro mucho más peliagudo.
La dirigencia gremial esperó hasta el fin de semana un llamado a reanudar el diálogo en la mesa paritaria, algo que no sucedió. Sigue firme hasta entonces la oferta oficial del 41,7% de aumento, que todo el gremio rechazó de plano y aplicó una medida de fuerza desdoblada: 48 horas de paro la semana pasada, y otras 48 horas esta semana.
"Ya es tarde para cualquier convocatoria. El plan de lucha está ratificado. El Gobierno parece decidido a no respetar el ámbito paritario. Hay un claro desinterés por ese marco, y lo demuestra al notificar a través de los medios diciendo que nos convocaron cuando no es cierto, que si no se acepta la propuesta lo hará de manera unilateral", señaló la secretaria adjunta de Amsafé, Adriana Monteverde a Rosario/12.
El ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, envió ayer un mensaje a través de la radio. Dijo que la intención del Ejecutivo es "mejorar la propuesta" brindada a los gremios del Estado provincial, pero advirtió que si no se encuentra un "punto de entendimiento" habrá una propuesta unilateral. "Nos comprometimos a buscar alternativas superadoras a la primera oferta. De todos modos, esas alternativas queremos enmarcarlas en un esquema de razonabilidad", señaló por LT8.
Mientras tanto, su par de Educación, Adriana Cantero, inauguró el ciclo lectivo. "Este no es un inicio común, es un inicio después de 2 años de sufrimiento, de incertidumbre por enfrentar lo desconocido, de tener que reinventarnos para poder sobrevivir y seguir andando”, dijo sin pensar en el humor del gremio docente.
El aumento propuesto en cuatro escalas (17,5% en marzo y las tres restantes del 8,08%) quedó lejos de colmar la expectativa docente. Y 33.000 afiliados de Amsafé votaron por el rechazo. En Sadop el tenor del malestar es similar.
"Nuestro objetivo es mejorar la propuesta, mantener conversaciones con los gremios para tratar de encontrar algún punto de entendimiento. Ahora, si no encontramos ese punto de entendimiento marcharemos a una propuesta unilateral que haga la provincia. Ese es el plan que tenemos diseñado", insistió Pusineri.
"Si hubiese voluntad la propuesta hubiese llegado. Nosotros negociamos de buena fe en la paritaria. No vamos a pensar que enfrente quieren perjudicar el diálogo. Estamos soprendidos y con mucho malestar", expresó Monteverde.
El paro entonces se reedita hoy y mañana, cuando además la protesta se complemente con una marcha en Santa Fe con un acto frente al Ministerio de Educación. "Allí se expresará lo que sentimos, el ajuste que hay en (la educación para) adultos, que se han observado cargos, se impide la inscripción de alumnos. Lo que nos deja una propuesta que es insuficiente y que no hubo otra. Hay muchos temas que se podrían haber solucionado en las mesas técnico paritarias", reprobó la dirigente de Amsafé.
El gremio guarda en la memoria las otras dos negociaciones salariales con la administración actual de la Casa Gris. "Este parece ser el estilo de (Omar) Perotti ante la paritaria. La prueba fue en el 2020: en plena pandemia suspendieron la paritaria y recién en setiembre la abrieron y con sumas en negro, no remunerativas", recordó.
No obstante, el mensaje gremial es insistir con el regreso al diálogo, para evitar más conflicto que repercute en el ciclo lectivo. "Para que haya un acuerdo tiene que haber convocatoria, reunión, discusión y propuesta con el análisis posterior. Que un ministro diga que si no aceptamos lo hará por decreto, no ayuda en nada a la solución", reprochó Monteverde y recordó: "No llamar a negociación es desoír el rechazo que expresaron 33.000 docentes".