Cuando están a punto de cumplirse dos semanas del inicio de la ofensiva rusa en Ucrania, Kiev acusó a Rusia de haber bombardeado un hospital de niños en la ciudad de Mariupol dejando un saldo 17 de civiles heridos. Los soldados rusos avanzan rápidamente desde hace varios días desde el norte y el noreste de la capital ucraniana. Las sirenas antiaéreas sonaron de modo intermitente en Kiev mientras el ejército reforzó las defensas en localidades cercanas para intentar frenar el avance del convoy enviado por el Kremlin, que se encontraría a unos 15 kilómetros de distancia. Mientras tanto estuvieron abiertos varios corredores humanitarios acordados entre las partes para evacuar a la población.
El bombardeo a un hospital infantil
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, denunció el ataque ruso en Mariupol y pidió de nuevo el cierre del espacio aéreo ucraniano. "Ataque directo de las tropas rusas al hospital infantil. Hay personas, niños bajo los escombros. ¡Atrocidad! ¿Cuánto tiempo más será el mundo cómplice ignorando este terror? Cierren el espacio aéreo ya", escribió Zelenski en su cuenta de Twitter.
El bombardeo "destruyó literalmente" una maternidad en el centro de la ciudad que también incluía una unidad de pediatría, aseguró Pavlo Kirilenko, el jefe de la administración militar regional del Donetsk. El ataque, que causó al menos 17 heridos según las autoridades ucranianas, tuvo lugar mientras estaban abiertos seis corredores humanitarios para la evacuación de civiles de las ciudades.
La vocera del ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajarova, dijo sin negar el ataque que los "batallones nacionalistas" ucranianos habían evacuado al personal y a los pacientes y desplegado en el sitio posiciones de tiro.
El primer ministro británico, Boris Johnson, denunció por su parte el "inmoral" ataque. "Es atroz ver el uso bárbaro de la fuerza militar contra civiles inocentes", afirmó la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, mientras que la ONU pidió "el cese inmediato de los ataques a hospitales, trabajadores de la salud y ambulancias".
Avanzan los corredores humanitarios
Según el jefe de la facción parlamentaria del partido gobernante ucraniano Servidor del Pueblo, David Arajamia, durante el día fueron evacuados más de 40 mil civiles de localidades de todo el país donde se desarrollan las hostilidades. "Seguimos trabajando, los puntos más problemáticos son Mariupol, Jarkov y la región de Kiev", dijo Arajamia sin especificar de qué ciudades fueron evacuados los civiles y qué rutas emplearon.
El jefe del centro de coordinación humanitaria del ministerio de Defensa ruso, Mijail Mizintsev, dijo que habían propuesto oficialmente a Kiev abrir diez corredores humanitarios este miércoles y llevar a cabo la evacuación de civiles y ciudadanos extranjeros de Kiev, Chernigov, Sumy, Jarkov y Mariupol, y que las fuerzas rusas cesaron el fuego desde las diez de la mañana hora local.
Además, el gobierno ruso reconoció oficialmente el envío de reclutas a la llamada "operación militar especial", como denomina a la invasión de Ucrania, y dijo que está tomando medidas para que todos ellos vuelvan a Rusia. Una de esas unidades, "que tenía asignadas tareas de apoyo al servicio de combate, fue atacada por un grupo de sabotaje de un batallón” ucraniano y que "algunos militares, incluidos reclutas, fueron capturados", dijo el vocero del ministerio de Defensa, Ígor Konashenko.
La central de Chernobyl, sin electricidad
Por la mañana, la Compañía Nacional de Energía Ukrenergo informó que la planta nuclear de Chernobyl se había quedado sin electricidad debido a los ataques de las tropas rusas. El ministro de Exteriores ucraniano, Dmitro Kuleba, alertó que los generadores de electricidad que abastecen a la central tienen una capacidad de reserva de unas 48 horas. "Después de eso, los sistemas de enfriamiento de la instalación de almacenamiento de combustible nuclear se detendrán, lo que hará que las fugas de radiación sean inminentes", advirtió Kuleba en su cuenta de Twitter.
Pero después el ministerio de Defensa ruso acusó a las fuerzas ucranianas de haber atacado la red eléctrica que abastece a la central nuclear. "Debo señalar con gran pesar que los nacionalistas ucranianos cometieron otra provocación extremadamente peligrosa. Atacaron la subestación y las líneas eléctricas que alimentan la planta de energía nuclear de Chernobyl. Los expertos rusos tomaron medidas inmediatas para cambiar a fuentes de energía del generador diesel de respaldo", dijo el viceministro de Defensa de Rusia, Nikolai Pankov.
Primera reunión de alto rango
Mientras tanto los ministros de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, y de Rusia, Serguei Lavrov, tienen previsto reunirse este jueves en el balneario turco de Antalya, en el primer encuentro de alto rango desde que empezara la invasión rusa hace dos semanas. Hasta ahora se habían reunido delegaciones de menor rango en Bielorrusia para tantear las posibilidades de un alto el fuego o para acordar corredores humanitarios en diferentes regiones de Ucrania.
Rusia insiste en sus exigencias para poner fin a la invasión, como la neutralidad y desmilitarización de Ucrania y un reconocimiento ucraniano de la soberanía rusa sobre la península de Crimea y de la independencia de las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk. Si bien Ucrania ha insinuado esta semana que podría negociar un estatus de neutralidad y renunciar a solicitar una entrada en la OTAN, se niega a ceder parte de su territorio.