El neuquino Enrique Plantey obtuvo este jueves el cuarto puesto en la prueba de Slalom Gigante de esquí alpino de los Juegos Paralímpicos de Invierno de Beijing 2022 y logró así la mejor ubicación de un argentino en la historia de la competencia, a la vez que consiguió su segundo diploma en el certamen.
Con un tiempo total de 2m03s14 que lo dejó en la primera posición por unos momentos, Plantey quedó a tan solo 2s22 del podio en la modalidad sentado del Slalom Gigante, lo que hubiera significado la primera medalla de Argentina en unos Juegos Paralímpicos de Invierno.
El ganador fue el noruego Jesper Pedersen, también campeón mundial, consiguiendo su tercer oro de la competencia con un tiempo de 1m54s20. La plata fue para el italiano René De Silvestro (1m57s50) y el bronce para el chino Liang Zilu (2m00s92).
Plantey, de 39 años, ya había sido octavo en la prueba masculina de Supergigante, en la modalidad sentado, en el segundo día de competencia, por lo que consiguió el primer diploma para la delegación.
En la historia de los Juegos, solamente Carlos Codina había obtenido un diploma paralímpico de invierno para la Argentina al ser octavo en la prueba de Snowboard Cross (categoría LL2) de PyeongChang 2018, en Corea del sur.
Plantey sufrió una lesión medular que lo dejó en una silla de ruedas a los 11 años, en un accidente automovilístico en el que fallecieron su papá y su hermano (fueron arrollados por una camioneta en la Ruta 22) y sobrevivieron él y su mamá.
El neuquino esquió por primera vez en unas vacaciones con amigos en San Martín de los Andes y descubrió el mundo del paraesquí alpino profesional en 2010, durante un viaje por trabajo a Colorado, Estados Unidos. Desde entonces representa al país en competencias de la categoría.
Los de Beijing son sus terceros Juegos de invierno, ya que participó en Sochi 2014 (Rusia) y PyeongChang 2018.