Desde Junio, Salta se incorporará al listado de provincias argentinas productoras de carbonato de litio. El grupo francés Eramet destinará 400 millones de dólares para desarrollar el emprendimiento minero en el yacimiento Centenario Ratones. Es el noveno proyecto anunciado durante la gestión de Matías Kulfas al frente de la cartera productiva, uno de los mayores impulsores dentro del gabinete de la explotación del producto como pieza fundamental para la transición energética en la que trabaja el Ministerio de Desarrollo Productivo.
La planta anunciada tendrá una capacidad de producción estimada anual en 24 mil toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE). De esta forma, Salta ingresará al tridente provincial que produce este mineral junto con Jujuy y Catarmarca. Es que si bien hay por lo menos ocho salares de la puna salteña en fase de exploración, aún no se había avanzado dentro de la provincia en la producción del carbonato para exportar.
Lo desarrollará el grupo minero francés Eramet a través de su subsidiaria local Eramine Sudamericana. Eramet está a cargo del yacimiento Centenario Ratones desde 2010 y ya lleva invertidos 200 millones de dólares en el proyecto, que había sido paralizado en abril de 2020 por "problemas estructurales económicos de la firma sumado a la pandemia de Covid-19". Ya reanudada la actividad, comenzará a vender en 2024. Al precio actual de 78.000 dólares la tonelada, equivaldría a casi 2 mil millones de dólares por exportaciones del mineral.
La empresa estatal provincial Recursos Energéticos y Mineros de Salta (Remsa ) se incorporó como socia del proyecto bajo la figura NSR, siglas en inglés que significan retorno neto de fundición. Se trata de una regalía que se cobra de acuerdo al valor de salida del producto minero en boca de mina, el mineral extraído, transportado y/o acumulado previo a cualquier proceso de transformación-, que será del 5 por ciento.
Además de ese porcentaje, el proyecto una vez en producción tendrá que derivar otra regalía del 3 por ciento sobre el valor de boca de mina, establecida bajo la Ley provincial 8.229. Ese porcentaje de lo producido quedará para el uso del gobierno provincial y los municipios colindantes al yacimiento, de acuerdo a los criterios establecidos por ley. De este modo el 20 por ciento se destinará a las comunas, un 10 por ciento a un fondo especial de promoción minera y un 70 por ciento restante para la provincia.
La empresa asegura que generará 2.000 empleos directos e indirectos. Durante la fase de construcción de la planta se prevé la incorporación de mil personas, durante la etapa de operación otros 300 empleos directos, además de los subcontratistas que estarán involucrados tanto en las operaciones como en la construcción.
Litio, divino tesoro
Con este anuncio de inversión, ya van más de 4.800 millones de dólares comprometidos en los últimos dos años en referencia a este mineral, lo que "marca un verdadero salto inversor inédito en la historia del país en este producto, que es altamente demandado porque va a ser la base de toda la revolución de la electromovilidad a nivel mundial”, aseguró Matías Kulfas. Se denomina coloquialmente "oro blanco" a este mineral por su importancia como insumo de baterías de larga autonomía empleadas para los autos eléctricos.
Argentina cuenta con una de las más grandes reservas de litio. Junto con Chile y Bolivia conforman el triángulo del litio y concentran más del 50 por ciento de las reservas de este mineral a nivel mundial. Bolivia es el país con mayor cantidad de reservas en el mundo, concentra 21 millones de toneladas por encima de los 14,8 millones de toneladas de Argentina y los 8.3 millones de toneladas de Chile. Luego se encuentran Estados Unidos y Australia.
De las tres naciones latinoamericanas, Chile y Argentina están muy por delante en producción, mientras que Bolivia tiene dificultades para comenzar. Australia es el mayor productor de carbonato de litio, concentrando el 55 por ciento de la producción mundial. Le sigue Chile con un 26 por ciento, China con 14 por ciento y Argentina con 6,2 por ciento de producción.
El próximo paso
Hoy en día el país exporta alrededor de 33.000 toneladas de carbonato de litio, que es el concentrado primario del producto tras una primera transformación de la salmuera extraída en los salares. Sin embargo, existen otras formas de agregarle valor al producto primario a través del desarrollo tecnológico e ir más allá de la producción de carbonato de litio: desde la extracción de otros minerales valiosos en la salmuera hasta la elaboración de celdas para baterías de celulares o autos eléctricos.
Actualmente, el desarrollo tecnológico en la extracción primaria del mineral se lleva a cabo en el país bajo el método de la evaporación solar, que consiste en extraer la salmuera de los salares, precipitar las sales correspondientes depositándolo en piletones especiales, e ir purificándolas en sucesivas evaporaciones hasta llegar a una concentración de 0,7-1,2 por ciento de litio.
Una vez conseguido ese concentrado se transfiere la salmuera a la planta de carbonato de litio donde se elimina la cantidad restante de otros minerales potencialmente comercializables como el magnesio, borato, sodio y potasio que hoy se utilizan como desechos y se seca y embolsa para su comercialización. Este método aplica hoy en el Salar de Olaroz la asociación multifirma Sales de Jujuy, que integran Orocobre S.A. (Canadá), Toyota Tsusho Corp (Japón) y Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (Jemse), la empresa estatal minera de la provincia.
El Centro de Investigación y Desarrollo en Materiales Avanzados y Almacenamiento de Energía de Jujuy (CidmeJu), más conocido como el Instituto del Litio, es la principal institución vinculada al estudio y desarrollo de este mineral y se encuentra desarrollando líneas de investigación para mejorar este método al tiempo que agregar valor.
Con respecto al desarrollo de las baterías, la experiencia más cercana es la que lleva adelante YPF Tecnología, la empresa de investigación y desarrollo para la industria energética que hoy preside el ex ministro de Ciencia Roberto Salvarezza. El trabajo de la planta estará centrado en incorporar tecnología para el diseño y la fabricación de las celdas y baterías de litio para atender demandas específicas del Estado y el sector productivo, la formación de recursos humanos calificados en la temática y la producción de conocimiento. Desde el Instituto buscan procesos electroquímicos que den lugar a mejores baterías, con mayor capacidad o de mayor duración aunque "aún falta mucho para tener una fábrica nacional de baterías de litio", aseguran.