A comienzos del siglo XX, Freud caracterizó al inconsciente como el lado oscuro del Progreso y la Razón. En la década del '70, Deleuze y Guattari rechazaron la idea de que fuera una especie de depósito de las experiencias que no queremos llevar a nuestra vida consciente. Sería entonces un laboratorio que produce nuevas posibilidades de imaginación. 

Según argumenta el filósofo italiano Franco "Bifo" Berardi, el "umbral histórico" actual, signado por la pandemia y el colapso del capitalismo, hace emerger otra forma de inconsciente. En este nuevo libro, titulado El tercer inconsciente (Caja Negra), el autor de La fábrica de la infelicidad se propone delinear una fenomenología de un trauma en curso para anticipar posibles paisajes psíquicos futuros.