Cada 14 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Endometriosis, con el objetivo de concientizar y visibilizar una enfermedad que, solo en Argentina, afecta a alrededor de un millón de mujeres, de entre 15 y 50 años. Es, además, una de las principales causas de infertilidad.
Durante el debate "Endometriosis en la Agenda Legislativa", promovido por la diputada del Frente de Todos Jimena López, la Dirección de igualdad de la Cámara de diputadas/os y EndoHermanas Argentina, se reclamó que se incluya esta patología en el Programa Médico Obligatorio (PMO) y se sancione una ley integral para el tratamiento de la enfermedad.
El martes, a partir de las 12, otro grupo de diputados y senadores nacionales de Juntos por el Cambio realizará en el anexo del Senado un encuentro con los especialistas de la Universidad de San Luis que elaboraron un proyecto de ley para la atención integral de la endometriosis.
¿Qué es la endometriosis?
La endometriosis es un trastorno, a menudo doloroso, que provoca el crecimiento de un tejido similar al que normalmente recubre el interior del útero (el endometrio) fuera del útero, y afecta más comúnmente a los ovarios, las trompas de Falopio y el tejido que recubre la pelvis.
En Argentina, si bien no existen datos oficiales, se estima que hay alrededor de un millón de mujeres afectadas por la enfermedad.
"Muchas de las mujeres que tenemos endometriosis tenemos dolores similares a las contracciones cada vez que menstruamos, también hemorragias; algunas tienen dolor al tener relaciones sexuales y un porcentaje no menor posee problemas de fertilidad", describió Alicia Sánchez Abella, presidenta de EndoHermanas Argentina, al mencionar los síntomas de la enfermedad.
Asimismo, Sánchez Abella, quien hoy tiene 55 años y recibió el diagnóstico a los 44 luego de haber pasado toda su vida con los padecimientos descriptos, aseguró que, más allá de las consecuencias biológicas, la endometriosis tiene impacto en lo psicológico, social y cultural.
"Primero hay una incomprensión de lo que te pasa por parte del entorno. La idea de que 'tanto no te puede doler', de que 'exagerás', está presente todo el tiempo. Y nosotras sabemos que hay momentos en los que el dolor no permite levantarse de la cama, o que las hemorragias son tan abundantes que tenemos que usar pañales", agregó.
"El impacto psicológico de estas crisis es muy fuerte -añadió-. Muchas chicas sufren violencia por parte de sus parejas, por ejemplo, porque tienen dolores al tener relaciones. Pero, además, como hablar de la menstruación es un tema tabú en muchos lugares todavía, la enfermedad afecta la posibilidad de desarrollar una vida normal".
Llegar a un diagnóstico tampoco es fácil: "A pesar de que se estima que una de cada diez mujeres lo padece, y que incluso en los últimos tiempos se habla de que afecta a tres de cada diez, los profesionales de la salud no sospechan de esta enfermedad cuando una persona menstruante dice que le duele", advirtió Sánchez Abella.
La enfermedad no está incluida como crónica dentro del Plan Médico Obligatorio y, por lo tanto, las obras sociales y las prepagas no brinden la cobertura adecuada. "Un tratamiento cuesta en promedio 5 mil pesos y, en el mejor de los casos, la cobertura es del 40%, pero muchas compañeras no tiene cobertura y deben pagar el importe completo, lo cual lo hace inaccesible", advirtió la titular de EndoHermanas Argentina.
"Tampoco hay inversión en investigación. Hasta ahora sólo tenemos tratamientos que permiten el control de la enfermedad, pero no la cura", describió.
EndoHermanas surgió en 2017, tras el fallecimiento de una mujer mientras era operada para quitarle el tejido que se le había adherido al intestino. Desde entonces, en la Argentina hubo varios proyectos de ley que contemplaban incluir la endometriosis en el PMO, pero todos ellos perdieron estado parlamentario.
En la actualidad, la Cámara de Diputados debate la iniciativa impulsada por la diputada Jimena López, la misma legisladora que acompaña las campañas de EndoHermanas para visibilizar la enfermedad.