En el segundo día del juicio, la fiscalía advirtió que "nunca se va a saber" quién mató a Nora Dalmasso, el crimen por el que está siendo juzgado Marcelo Macarrón, viudo de la víctima, acusado de ser presunto autor intelectual del femicidio, cometido en 2006. Poco después, en una declaración que interrumpió a los 20 minutos porque dijo sentirse mal, el propio Macarrón aseguró ante el tribunal de Río Cuarto que está "destruido y con crisis depresiva", desde el crimen y que "varias veces" pensó en suicidarse.
En la audiencia, que todavía se está desarrollando, el fiscal Julio Rivero indicó ante el jurado popular que a Dalmasso "la mataron cuando se encontraba desnuda y dormida en la cama de su hija", que "la mató una sola persona" y "el asesino no es un loquito ni un psicópata sexual". "Nora no supo quién la mató. Nunca se va a saber quién la mató. Esa noche no esperaba a nadie, y menos la muerte, porque si hubiese esperado la muerte se hubiese arreglado", señaló, en base a los testimonios de amigas de la víctima, que definieron a Dalmasso como "muy coqueta".
Durante esta segunda jornada, se espera que declaren tres testigos: dos vecinos que estuvieron vinculados al hallazgo del cuerpo de Dalmasso y el primer policía que ingresó en la vivienda donde yacía el cuerpo de la mujer.
Marcelo Macarrón llegó a la sede judicial de Río Cuarto cerca de las 8.45, para declarar ante el jurado popular, los magistrados y las partes que participan en el debate. A diferencia de lo que ocurrió en la primera jornada de audiencias, ingresó directamente a la sede judicial sin brindar declaraciones a la prensa.
Qué pasó en la primera audiencia
La jornada del lunes fue dedicada exclusivamente a la lectura ante las partes de la elevación a juicio oral realizada en 2019 por el fiscal Luis Pizarro, quien acusó a Macarrón como autor intelectual del crimen de Dalmasso, bajo la figura de "homicidio calificado por el vínculo, por alevosía, y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal", en calidad de instigador, un delito que contempla la pena de prisión perpetua.
Macarrón llegó a los tribunales acompañado de sus hijos Facundo (33) y Valentina (30). Antes de ingresar en la sala de audiencias, aseguró a la prensa que es inocente y calificó de "mamarracho" la labor del fiscal Luis Pizarro. Además, sostuvo que vive "con mucha angustia" el proceso de enjuiciamiento y consideró "muy difícil el esclarecimiento" de lo ocurrido después de tantos años.
Ante los tribunales, además, la familia de Macarrón y Dalmasso encabezó una manifestación de la que participaron otros familiares y amigues. Allí, anticiparon que cuando declaren en la causa, probablemente la próxima semana, presentarán "nuevas pruebas" sobre el sospechoso del homicidio al que "nunca investigaron".
Valentina Macarrón dijo que su padre es "inocente" y cuestionó que "nunca se valoraron ni se investigaron" materiales que la familia aportó a la justicia". Había "un montón de pruebas sobre el sospechoso" que involucraban a "un empresario que era amigo de la familia". Su hermano Facundo, en tanto, aseveró que "desde el punto de vista lógico y jurídico, jamás se puede llegar a una sentencia condenatoria" porque "la acusación no tiene ningún sustento probatorio. No tiene respaldo de hechos objetivos que justifique que mi padre esté hoy sentado en el banquillo de los acusados".