La Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia, que preside Leopoldo Moreau, se presentará este miércoles para pedirle al juez Marcelo Martínez de Giorgi que la acepte como amicus curiae (amigo del tribunal) en la causa en la que se investigan las andanzas de los espías conocidos como Súper Mario Bros y el espionaje en las cárceles durante el gobierno de Mauricio Macri.
A las 11 de la mañana, una delegación encabezada por Moreau –e integrada, entre otros, por Oscar Parrilli, Rodolfo Tailhade, Eduardo Valdés y Blanca Osuna– va a reunirse en Comodoro Py con Martínez de Giorgi, el juez que se hizo cargo de la causa que inicialmente tramitó en la justicia federal de Lomas de Zamora.
La decisión de que la Bicameral se presentara como amicus curiae se tomó en la semana después de que la Cámara Federal porteña –con los votos de Mariano Llorens y Pablo Bertuzzi– revocara casi 30 procesamientos y sostuviera que no había elementos para sostener que durante el gobierno de Macri se llevó adelante un plan masivo de espionaje. Por el contrario, el tribunal terminó convalidando la teoría del cuentapropismo que enarbolaban los funcionarios macristas para desentenderse del espionaje que llegó a incluir a la hermana menor del entonces presidente.
La postura de la Cámara Federal es diametralmente opuesta a la que sostiene la Bicameral, que el año pasado sostuvo en un informe que existió un plan sistemático ideado desde lo más alto del gobierno nacional que encabezaba Macri. Después de ese fallo, la Bicameral pidió el juicio político de Llorens y Bertuzzi.
Según pudo saber Página/12, la Bicameral le va a ofrecer cooperación técnica a Martínez de Giorgi y le va a entregar distintos dictámenes que aprobaron en el Congreso en los que se remarca la trascendencia y gravedad de lo que se denuncia.
Semanas atrás, el juez reactivó la investigación y convocó a distintas personas a prestar declaración testimonial. Entre otros, está citado Mariano Macri, que le dijo al periodista Santiago O’Donnell que a su hermano le gustaba manipular el juguete del espionaje. Este martes, se presentó el exfuncionario del Ministerio de Defensa José Luis Vila, a quien la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) le dejó una bomba sin conectar a modo de advertencia en el edificio en el que había vivido.