El Consorcio ABC de Frigoríficos Exportadores de carne resolvió, al cierre de la tarde del miércoles, que seguirá en el programa Cortes Cuidados, dejando así sin efecto el anuncio anterior, de esta misma semana, de que abandonaría su participación por diferencias con las políticas de autorización de exportaciones que administra el Ministerio de Agricultura y Ganadería.
Fue el ministro del área, Julián Domínguez, quien en una muy tensa y "nada amigable" reunión que tuvieron al mediodía, les comunicó que dispondría la inhabilitación para exportar a todo aquel frigorífico que incumpliera el acuerdo. Esto es, ofrecer al mercado interno un volumen total de 6000 toneladas mensuales de los llamados cortes populares a precios accesibles, que habían sido fijados al cerrarse el acuerdo de enero.
"Les informé que quienes no cumplan con los compromisos asumidos con las y los argentinos no posdrán continuar exportando carne", informó Domínguez a través de su cuenta de twitter poco después de las 13 horas.
La posición del Consorcio ABC, que preside Mario Ravettino, no era acompañada por las demás cámaras frigoríficas, y tras la dura advertencia del ministro decidieron desistir de su postura. Dicho consorcio agrupan a las principales empresas exportadoras del sector, varias de ellas multinacionales, y representan en su conjunto el 82% de las ventas de carne al exterior.
El tono de la comunicación del ministro indicaba que el clima del encuentro no había sido muy amable, y que el final lo fue menos. Al explicar su postura, Domínguez señaló que "tomé esta decisión en el marco del conflicto bélico que impulsó subas a nivel global en el precio de los alimentos, situación que se suma a la crisis que atraviesa nuestra ganadería por la sequía, los incendios en Corrientes y el faltante de 1 millón y medio de cabezas".
Un día antes, el martes, había tomado estado público que el Consorcio ABC, que reúne a los mayores frigoríficos exportadores del país, había decidido de manera unilateral abandonar el programa de Cortes Cuidados, por supuestas desaveniencias con la política oficial de exportaciones.
Desde fines del año pasado, las distintas cámaras industriales y entidades agropecuarias del sector habían acordado con el ministerio la reapertura parcial de las exportaciones, habilitando las ventas al exterior de la carne de vacas categorías D y E, y preservar para el mercado interno, los cortes de mayor demanda interna para los que se mantenía la prohibición de su exportación: asado, vacío, matambre, falda, tapa de asado, nalga y paleta.
A su vez, se fijó un valor de comercialización interna para estos cortes (en ese momento, entre un 20 y un 30% por debajo del precio promedio de mercado) que regiría por tres meses (desde el 7 de enero hasta el 7 de abril), plazo al término del cual serían revisados los valores. Pero se fijaba un compromiso para todo el año de abastecimiento de 6000 toneladas mensuales de dichos cortes para el consumo interno.
Esta semana el Consorcio ABC decidió abandonar el programa, por supuestas discrepancias con la política oficial. Adujeron que se habilitaba para la exportación a empresas sin establecimientos de faena propios y con carne de dudosa procedencia. Se aseguraba que estos otros exportadores no liquidaban sus ingresos por el mercado oficial de cambios y entonces sacaban ventajas de las diferencias de cambio en los mercados paralelos. Y además dijeron sospechar que, bajo la aparente exportación de carne de vaca descarte, se estaban exportando los cortes que a ellos les estaba prohibido vender al exterior.
En la tensa reunión de ayer, el ministro y sus colaboradores no sólo refutaron uno por uno dichos argumentos, sino que además dejaron en evidencia que el modo de procededr (abandono unilateral del acuerdo) podía ocultar otras intenciones. De hecho, las demás cámaras frigoríficas no acompañaron en ningún momento la posición del consorcio ABC.
Los números que el Ministerio de Agricultura puso sobre la mesa fueron los siguientes:
@ Las exportaciones bovinas para 2022 solicitadas por las cámaras y las entidades agropecuarias durante las mesas de trabajo se cumplieron según lo acordado, incluso en exceso. El acuerdo fijó una meta para el primer cuatrimestre del año en 200 mil toneladas. Durante enero, se exportaron 52 mil toneladas y en febrero, unas 62 mil toneladas (res con hueso). En lo que va de marzo ya se llevan aprobadas 27.500 toneladas.
@ El 82% de las exportaciones corresponde al Consorcio ABC; el 4,5% a la Unión de la Industria Cárnica Argentina (UNICA); el 2,4% a la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA); y el restante 11% fueron cesiones a operadores sin planta. Se trata de menos de dos docenas de operadores, entre los cuales los que representan más del 80% de las operaciones son empresas muy reconocidas y grandes que no pueden ser calificadas de "truchas".
@ El ritmo de operaciones para esta época es un 10% mayor a lo previsto en la programación con la cadena cárnica. De los 67 operadores para la exportación, en sólo 1una empresa se detectó que no había ingresado las divisas por exportación, en una suma de US$12 millones de dólares que representó el 25% de la exportación realizada por la firma. El Banco Central ya tomó la intervención correspondiente. La empresa tiene 30 días para su descargo.
@ Las cámaras exportadoras acordaron destinar unas 6000 toneladas por mes al mercado interno de carne de buena calidad a precios reducidos. No obstante, en febrero el consorcio ABC incumplió el acuerdo. Sobre 6000 toneladas, se destinaron unas 2500 toneladas.
La reunión no terminó con buen clima. Domínguez se levantó en un momento y dijo que no iba a admitir que pusieran en duda la transparencia de su gestión. Y dejó la advertencia que si no complían el acuerdo, los inhabilitaría para exportar. Pocas horas después, el consorcio ABC comunicaba que desistía de su posición rupturista.