"Hemos sacado casi todos los presos de comisarías y vamos a dejar solo seis puntos de ingreso de detenidos, uno por cada distrito, y en esos puntos va a ver fiscales, defensores, cámaras de seguridad y personal civil de modo de tener un control absoluto del momento en que ingrese una persona hasta que se lo traslade. Es uno de los temas más delicados y hay que mejorarlo para preservar los derechos de las personas detenidas que muchas veces son inocentes y que incluso en el caso de que resultaren culpables, hay que respetarles sus derechos".

(Declaraciones del gobernador Miguel Lifschitz al programa de Leo Ricciardino en Radio Si).