Tal como se había anunciado días atrás, el Congreso y la zona que lo rodea amaneció blindado con un amplio vallado policial a la espera de las movilizaciones organizadas para rechazar el acuerdo entre el gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que se debatirá en las próximas horas.
El escenario es parte del modo con que el gobierno porteño decidió prevenir posibles incidentes similares a los que ocurrieron la semana pasada, cuando durante el tratamiento de esa norma en Diputados fue atacado a piedrazos el despacho de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
El montaje de vallas fue desplegado durante la madrugada. Frente al palacio legislativo, se emplazaron vallados en los siguientes cruces, donde los cortes son totales:
- Combate de los Pozos y Rivadavia
- Hipólito Yrigoyen y Combate de los Pozos
- Callao y Bartolomé Mitre
- Hipólito Yrigoyen y Solis
- Avenida Rivadavia y Rodríguez Peña
A la espera de las movilizaciones
Si bien las marchas están previstas para la tarde, varias organizaciones sociales y políticas comenzaron a movilizarse desde temprano. Mientras tanto, habrá ollas populares en distintos puntos de la Capital Federal para dar cuenta de la situación de emergencia que atraviesan los barrios más pobres del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
La Corriente Clasista y Combativa (CCC) realiza desde las 10 una jornada nacional de lucha con cortes de rutas y ollas populares en distintos accesos a la ciudad de Buenos Aires. “Que la deuda la paguen los que se la llevaron”, dice el lema que rechaza el acuerdo por el préstamo tomado por Mauricio Macri, y que es calificado como “fraudulento”.
Pero el grueso de las concentraciones se dará a partir de las 17 en la Plaza Congreso. Se darán cita organizaciones y partidos de izquierda, sectores del oficialismo que rechazan el acuerdo y varios militantes de otras organizaciones que desde durante los últimos días reclaman medidas de urgencia para los sectores más vulnerados.
A pesar de que el centro de la convocatoria es el Parlamento, como es habitual las movilizaciones confluirán desde distintos puntos y el más convocante será 9 de Julio y Avenida de Mayo, para marchar por esta hacia la sede del Poder Legislativo.
La zona del Congreso está prácticamente blindada. Todo apunta a evitar incidentes como los del jueves pasado, cuando Diputados le dio media sanción al proyecto que el Senado convertiría hoy mismo en ley.
Cómo será el operativo policial
El despliegue policial será mucho más duro que esa jornada, así lo anunció el gobierno porteño con la excusa de evitar riesgos como los que vivieron la vicepresidenta Cristina Kirchner y sus allegados en el despacho de la vicepresidencia de la Cámara alta, que da sobre el frente del Parlamento.
Estos hechos originaron dos causas judiciales, una que se instruye en el fuero federal y está a cargo de la jueza María Eugenia Capucchetti y otra en la que interviene el magistrado porteño Norberto Circo. Hay al menos tres detenidos.
El comunicado de la administración de Horacio Rodríguez Larreta dice que “como parte de este despliegue, se dispondrá de la presencia de un importante número de efectivos y el acompañamiento del equipo de agentes de tránsito y de seguridad, para ordenar el tránsito en los alrededores de la manifestación".
El operativo será "respaldado por las cámaras de videovigilancia dispuestas en la zona, que serán supervisadas desde los Centros de Monitoreo Urbano de la Policía de la Ciudad para evitar episodios de violencia e intervenir rápidamente en caso de ser necesario".
