El costo de la canasta básica alimentaria subió un 9 por ciento durante febrero, por lo que una familia integrada por dos adultos y dos menores necesitó percibir ingresos por 37.413 pesos para adquirir la cantidad mínima de alimentos y no caer en la indigencia, informó el Indec. Por su parte, la canasta básica total (CBT) aumentó 6,6 por ciento durante febrero, por lo cual esa misma familia tipo requirió percibir ingresos por 83.807 pesos para no caer debajo de la línea de la pobreza.
En el primer bimestre, la canasta básica alimentaria (CBA) acumula un incremento de 13,5 por ciento, mientras que la canasta básica total marca una suba de 10,1 por ciento en el mismo período. En los últimos doce meses, la CBA acumula un incremento de 52,2 por ciento y la CBT, del 44,5 por ciento.
En febrero del 2021, aquel hogar representativo de cuatro integrantes necesitaba 24.575 pesos para evitar caer en la indigencia, frente a los 37.413 pesos actuales. En el caso de la pobreza, hace un año la línea estaba definida por los 57.997 pesos, mientras que ahora se ubica en 83.807 pesos. El fuerte encarecimiento de los bienes y servicios básicos tendrán impacto negativo en los índices de pobreza e indigencia, se estima, ya que los ingresos no se están moviendo con la misma velocidad.
Según datos oficiales, el índice de salarios de los trabajadores no registrados acumuló en 2021 un avance del 40,6 por ciento, muy por debajo de la inflación del período, del 50,9 por ciento. En el caso de los asalariados privados registrados, los ingresos subieron un 55 por ciento en promedio el año pasado, mientras que en el caso de los empleados públicos el incremento fue del 58,6 por ciento.
De todas maneras, la medición sobre incremento porcentual de ingresos no tiene en cuenta el nivel de los ingresos, que viene deteriorado de muchos años de alta inflación y crisis económica.
En el cuarto trimestre del año pasado, el ingreso medio per cápita familiar de la población argentina según la EPH fue de 31.035 pesos, lo cual está apenas por encima de la canasta de pobreza individual que mide el Indec, que se ubica en 27.122 pesos, que no incluye gastos esenciales y muy relevantes como el alquiler. Entre los asalariados, el ingreso medio es de 50.849 pesos.
Alimentos y bebidas
Según el informe de inflación que elabora el CEPA, los alimentos estuvieron en el tope de aumentos de precios el mes pasado. Por ejemplo, el tomate redondo subió un 40,8 por ciento y acumula en el año un 156,4 por ciento. La lechuga tuvo un alza de 72,7 por ciento mensual y de 161 por ciento en el bimestre. La cebolla, un 30,8 por ciento mensual y 45,5 ciento desde comienzos de año. El limón subió 27 por ciento en febrero; la naranja, un 19,8; la papa, un 16,3 y la manzana, un 10,9 por ciento mensual. La banana avanzó un 7 por ciento mensual.
En el caso de las carnes, los aumentos del mes fueron del 6,1 al 11 por ciento mensual. En bebidas, la cerveza tuvo un incremento del 10 por ciento mensual. Entre los productos derivados del trigo, el pan flauta sufrió un incremento de 7,6 por ciento mensual y acumula en el bimestre un 8,6 por ciento.
En el rubro de lácteos, la leche en polvo entera tuvo un alza de 15,8 por ciento mensual, acumula en el año un 17 por ciento y un 75,4 por ciento en los últimos doce meses. El queso sardo aumentó 6,6 por ciento, 9,7 por ciento en lo que va del año y 79,3 por ciento anual. Los huevos de gallina tuvieron un incremento de 22,5 por ciento mensual, acumulan en lo que va del 2022 una suba del 25,5 por ciento y del 57,2 en doce meses.
