En Lille, Francia, por estos días acontece Séries Mania, festival internacional que anualmente celebra las series de televisión con estrenos inéditos, muestras temáticas, fiestas alusivas. Como parte de la programación de la edición en curso, habemus una exhibición que se rinde completa e irrevocablemente a los estilismos de la entrañable Fran Fine, es decir, la niñera interpretada por Fran Drescher en el programa sensación de los 90s, la sitcom The Nanny. “Los looks de este personaje, con todos sus estampados y colores brillantes, son el resultado de un trabajo cuidadosamente curado, que traduce el temperamento audaz y el humor descarado de la muchacha de Flushing, Queens”, señalan desde las filas de Séries Mania, recordando que fue Brenda Cooper, diseñadora de vestuario del show, la responsable de convertir en un inoxidable ícono de la moda a la chispeante neoyorkina que cuidaba a los párvulos del escrupuloso Maxwell Sheffield, tan recordada por sus salidas graciosas como por su risa, y obviamente, por su ropa.

“El estilo que creé para ella estaba pensado para superar la prueba del tiempo. No fue concebido como algo trendy. Es tan ponible hoy como lo era entonces. Es poderoso y marca estela. También es sexy. Creo que a los y las millennials les encanta”, comentaba Cooper -ganadora de un Emmy por su labor- hace un tiempo, cuando el revival noventero recuperaba por doquier los outfits de Fran Fine gracias a cuentas en redes sociales ciento por ciento dedicadas a postear su pilcha, a recrear sus looks, a compararlos con obras maestras de la pintura y la escultura. Y eso que, en sus días, Fran era considerada rematadamente kitsch, aunque eventualmente fuera valorada como soplo de aire fresco al animarse a estéticas jugadas, lúdicas, sin prejuicio: mezclaba animal print con rayas, recurría sin pudor a las lentejuelas, también a los tonos flúor, etcétera.

Ojo, tampoco es que la nanny se pusiera cualquier trapo: en cada episodio lucía conjuntitos de Todd Oldham, Gucci, Chanel, Fendi, Versace, Moschino, Marc Jacobs, Bob Mackie y siguen las firmas top. Algunas de estas prendas son las que vuelven al spotlight en el mentado festival de Lille, Séries Mania, más precisamente en el centro de exposiciones de arte contemporáneo Le Tripostal, que presenta una selección de atuendos idénticos a los que llevase Drescher, “convertidos en objeto de culto para fashionistas”. También se exhiben fotografías exclusivas, inéditas, tomadas en el set durante el rodaje.