Después de dos años de pandemia, la conmemoración del Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia volvió a ser masiva en la ciudad. Mas de 90 mil rosarinos y rosarinas coparon las calles en una multitudinaria marcha por el centro que terminó con un acto en el Parque Nacional a la Bandera. “Hoy nos encontramos ante el desafío de trabajar todos juntos para pelear por una patria justa, libre y soberana, la que soñaron nuestros 30 mil compañeras y compañeros”, se leyó como parte del documento elaborado por las distintas agrupaciones que integran el Espacio Juicio y Castigo.

La fría y ventosa tarde de ayer no fue impedimento para que Rosario vuelva a recordar a las víctimas del Terrorismo de Estado a 46 años del último golpe cívico-militar en Argentina. Con el vigente grito del “Nunca Más”, agrupaciones políticas, sociales y sindicales como así también ciudadanos tomaron nuevamente las calles después de dos años en los que la situación epidemiológica no daba tregua. Si bien el año pasado y el 2020 hubo algunas movilizaciones aisladas, no pudieron ser tan masivas como la de ayer, ahora en un contexto más alentador con la vacunación avanzada y con los casos de Covid-19 en disminución.

Tras concentrarse en la Plaza San Martín, las columnas de personas comenzaron a marchar por calle Santa Fe y Moreno hasta Oroño para pasar frente a los Tribunales Federales, donde todavía hay causas penales abiertas para juzgar a quienes tuvieron algún tipo de participación en la represión y genocidio instaurado por la dictadura. Luego doblaron por San Luis hasta Buenos Aires y de ahí hasta Córdoba para concluir la movilización en el escenario instalado frente al Monumento Nacional a la Bandera. Todo el recorrido se realizó ordenadamente y sin inconvenientes y con un amplio operativo de tránsito con cortes de calles que se iban levantando a medida que avanzaba la gente.

Con bombos, platillos y redoblantes, la multitudinaria marcha se hizo escuchar por las calles rosarinas bajo la consigna del Nunca Más y el recuerdo constante de los 30.000 desaparecidos. Banderas de distintos partidos políticos, de movimientos sociales, de sindicatos y de familiares de víctimas de la dictadura le daban un poco de color a una tarde gris. Al mismo tiempo se podían ver a distintas generaciones compartiendo un mismo sentimiento. Gente mayor, adultos, adolescentes y chicos pequeños en los hombros de sus padres le daban un marco familiar a la marcha. De acuerdo a los cálculos estimativos de la propia Municipalidad, durante la tarde se movilizaron alrededor de 90 mil personas. Este número se desprende de que hubo 30 cuadras de marcha y más o menos se calcula que cada cuadra es equivalente a media tribuna de un estadio de fútbol.

Cerca de las 20 comenzó el acto central organizado por el Espacio Juicio y Castigo, el cual nuclea a distintos organismos de derechos humanos, organizaciones sociales y partidos políticos, en conjunto con los trabajadores municipales provinciales. El mismo se llevó a cabo en un escenario instalado en el Parque Nacional a la Bandera, de espalda al río, y comenzó con la lectura del documento consensuado por todas las agrupaciones y fuerzas políticas que integran el Espacio: "Hoy volvemos a ocupar las calles, recordando que hace 46 años nuestros enemigos de siempre, los dueños de la tierra, los monopolios mayoritariamente extranjeros, los bancos y financieras, los partidos y los medios de la derecha entreguista atentaron una vez más contra la democracia, con el brutal golpe cívico, militar, eclesiástico y empresarial que hundió al país en una inmensa dependencia cultural, política, económica y social".

En el documento leído ayer también hubo una referencia a la situación actual de la provincia: “Nos toca levantar la voz una vez más en Santa Fe cuando vemos que la dirigencia muestra una falta total de compromiso y ética para con la sociedad. Existen sectores del poder legislativo, del poder judicial y la estructura policial que continúan atentando contra los intereses del pueblo como hace 46 años llevándonos a quedar expuestos y sin defensa a los de sectores mafiosos que han quedado enquistados dejándonos a la intemperie de la inseguridad y muertes más dolorosas en nuestros barrios”. 

Por primera vez, entre los oradores y lectores que participaron del acto hubo un representante de pueblos originarios y también una del colectivo trans, quien logró la reparación histórica por las agresiones torturas y persecusiones que vivió ese colectivo durante la dictadura.