A 45 años de su asesinato y desaparición física por parte un grupo de tareas de la Armada, el escritor, periodista y militante montonero Rodolfo Walsh fue recordado ayer en distintos actos por funcionarios y dirigentes gremiales. La Secretaría de Derechos Humanos descubrió una placa en la estación de subte de la Línea E que lleva su nombre, en San Juan y Entre Ríos, donde también el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) y la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP) inauguraron junto a organizaciones políticas y de derechos humanos un mural en homenaje al autor de “Operación Masacre”. El Ministerio de Cultura de la Nación y el Municipio de Tigre presentaron una señalética en la estación fluvial de esa localidad, donde Walsh vivió hasta 1976.
“Es importante que haya personas que mantienen viva y honran la memoria de quienes lucharon por un país más justo y denunciaron las violaciones a los derechos humanos”, expresó Fiorella Metetieri, nieta de Walsh, durante el acto en el que la Secretaría de Derechos Humanos descubrió una placa con las palabras finales de la Carta Abierta de un escritor a la Junta Militar.
“Luchó por otro mundo y otra sociedad, con las herramientas que tenía a su alcance en un contexto represivo muy hostil, no solamente a nivel nacional sino en toda la región. Y lo hizo con una lealtad absoluta a su generación, a sus compañeros y compañeras, y a su clase, que era la clase trabajadora”, expresó Agustín Lecchi, secretario general de SiPreBA. “Una paradoja de la historia: hoy es el Día del Trabajador y la Trabajadora de Prensa no por el secuestro y la desaparición de Rodolfo sino porque se cumplen 78 años de que Perón sancionó la Ley 12.908, que es el Estatuto del Periodista Profesional. Rodolfo –y esa generación de luchadores y luchadoras– defendió esas leyes que el macrismo vino a atacar”, recordó. Reivindicó a los sindicatos que ocuparon las calles durante el macrismo, destacó que “hay mucha acumulación del movimiento obrero y eso tiene que servir para que el neoliberalismo no vuelva y para conquistar derechos. No nos resignamos a echar a Macri sino que queremos recuperar los derechos que perdimos, recuperar el salario, y también eso es reivindicar la memoria de los 30.000”.
“Rodolfo fue periodista, fue escritor, fue intelectual, pero fundamentalmente fue todo eso orgánico de la clase trabajadora, porque él fue el que hizo el Diario de la CGT de los Argentinos”, destacó Roberto "Beto" Pianelli, secretario general de los Metrodelegados. Recordó luego la “Carta Abierta”, señaló hacia arriba para apuntar al buzón donde Walsh alcanzó a despachar varias copias antes de ser cercado por una patota de la ESMA y destacó que en ese texto “explicó magistralmente que la dictadura fue para aplicar un plan económico, para defender a los mismos que hoy tienen el poder económico y que fugaron la deuda externa”. “Rodolfo quería todo lo contrario: la distribución de la riqueza, una sociedad de iguales. Por eso fue secuestrado y asesinado”.
“Como dijo Walsh alguna vez, este es un acto de dignidad, porque nos devuelve a los trabajadores y trabajadoras el nombre de uno de nuestros grandes luchadores. Es bueno que esto sea de los trabajadores de prensa y del subterráneo porque nos devuelve un territorio que las clases dominantes tratan de mantener en la oscuridad, en la ignorancia, sin memoria”, reflexionó Hugo Yasky, secretario general de la CTA de los Trabajadores, durante el acto al que enviaron su adhesión Pablo Moyano en nombre de la CGT y sindicatos como La Bancaria y CTERA, entre otros. “Walsh lo dijo con una frase que para mí es una brújula: las clases dominantes siempre quieren que para nosotros los trabajadores la historia empiece desde cero, que no tengamos pasado ni referencia. Reivindicar en este acto la memoria de Walsh es ir en contra de esa máxima y mandato que nos quieren imponer los que se creen dueños de la riqueza material y simbólica, y quieren la desmemoria”, remarcó el actual diputado Yasky, quien recordó que como maestro “utilicé durante mucho tiempo Operación Masacre como crónica histórica, para leerla con mis alumnos, porque es parte de la historia de nuestro pueblo”.
Por último tomó la palabra el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti. Destacó que la lucha de los 30 mil desaparecidos “no fue gratis” porque “pusieron a disposición del otro la propia vida, que es el patrimonio más grande que tiene un ser humano”. El funcionario subrayó que las víctimas del terrorismo de Estado “no eran suicidas” sino que “apostaban a la familia, tenían chicos y les gustaba amar, reír y bailar”. “Sin embargo, priorizaron el compromiso de la lucha política y la resistencia al modelo económico que instaló” la dictadura.
En Tigre, en tanto, el ministro de Cultura, Tristán Bauer, inauguró junto al intendente Julio Zamora una señalética en la estación fluvial que recuerda los años de Walsh en el Delta. Luego se trasladaron a “El Edén”, la vivienda ubicada en Liberación 459 del Río Carapachay, donde el escritor y militante vivió entre 1971 y 1976.
“Quisimos homenajear a una figura extraordinaria, un artista que representa la dignidad y la lucha, un militante y escritor excepcional. Es una semana en la que recordamos el 24 de marzo, la lucha de las madres, las abuelas y su ejemplo, evocando a los 30.000 desaparecidos y a la figura de Walsh. Estamos muy conmovidos por estar en su casa en Tigre, un lugar que eligió y del que nunca se hubiera ido de no ser por la persecución de los militares”, destacó Bauer.