Aunque la superproducción Duna, dirigida por el canadiense Denis Villeneuve, acaparó seis estatuillas, esencialmente en los rubros técnicos, la gran ganadora de la noche de los premios Oscar 2022 fue CODA: Señales del corazón, que obtuvo las estatuillas a la mejor película, guion adaptado (Sian Heder) y actor de reparto (el sordomudo Troy Kotsur). Por su parte, Jane Campion, obtuvo el Oscar a la mejor dirección por El poder del perro, el único Oscar de los doce a los que el film aspiraba. Mejor actor fue Will Smith por Rey Richard: una familia ganadora, y mejor actriz Jessica Chastain por Los ojos de Tammy Faye.
Hubo un momento particularmente violento e incomodo durante la ceremonia, cuando el comediante Chris Rock desde el escenario hizo un chiste desafortunado sobre la cabeza rapada de la actriz Jada Pinkett-Smith, la mujer de Will Smith, y el actor ganador del Oscar reaccionó con una cachetada y luego un insulto que repitió a los gritos, que originalmente fueron escamoteados por el director de cámaras. Luego pidió disculpas entre lágrimas de triunfo.
Después de dos años de pandemia dura, en los que la entrega de los premios Oscar tuvo que reinventarse online y perdió brillo y rating, la de este domingo a la noche volvió al Dolby Theatre. Salvo los barbijos, las medidas sanitarias no fueron olvidadas (la vacunación era obligatoria para asistir y hubo un aforo limitado, con mesas en lugar de butacas en las primeras filas), pero invitados, candidatos y premiados regresaron a la platea y al escenario, y por supuesto al desfile de modas de la alfombra roja.
La previa de la ceremonia había empezado temprano en la tarde de la ciudad de Los Angeles, con el clásico desfile de las estrellas en el ingreso a la alfombra roja del Dolby Theatre. Allí no pasó inadvertido un detalle: muchos invitados como Samuel Jackson, Pedro Almodóvar, el italiano Paolo Sorrentino (director de La mano de Dios), o la actriz Jamie Lee Curtis llevaron a la entrega de los Oscar un lazo azul, en apoyo a los refugiados ucranianos, con la leyenda "With Refugees".
Otro detalle no menor de la previa. La ceremonia del año pasado fue la de más bajo rating en la historia del Oscar desde que se transmite por TV. Y para agilizar el show y seducir a la audiencia en todo el mundo la Academia tomó este año una decisión tan drástica como controvertida: anunciar los ganadores de ocho de las veintitrés ternas de los premios Oscar 2022 -la mayoría en rubros técnicos- antes del inicio de la transmisión en vivo y mostrar fragmentos editados de los agradecimientos durante la gala.
Previsiblemente, la mayoría de los premios -entre ellos los Oscar al mejor sonido, música original, edición y diseño de producción para Duna- se filtraron a la prensa antes de la transmisión y circularon ampliamente por redes antes de que la propia Academia decidiera difundirlos oficialmente en sus cuentas web. Esto generó, como era de esperar, una oleada de quejas de decenas de miembros de la industria. A las críticas individuales acumuladas desde que se conoció la noticia, entre las que se destacan las de los directores Steven Spielberg, Jane Campion y Denis Villeneuve, se sumó una carta enviada al presidente de la entidad, David Rubin, en la que más de sesenta firmantes coincidieron en señalar que la medida “hace un daño irreparable a la posición de la Academia como árbitro imparcial y administrador responsable de los premios más importantes de nuestra industria”.
Uno de los momentos más destacados fue también uno de los primeros, cuando Ariana Debose ganó la estatuilla a la mejor actriz de reparto por Amor sin barreras. Era un premio -literalmente- cantado, pero Debose le agregó sal y pimienta cuando en el discurso de agradecimiento, aprovechando que su personaje reivindica su identidad puertoriqueña, ella celebró la suya personal. Debose se reivindicó como "como afrolatina y abiertamente gay". Y enfatizó, Oscar en mano: “A todos aquellos a quienes alguna vez dudaron sobre su identidad, les prometo que hay un lugar para nosotros”.
Los "latinos", como los llaman en Hollywood, tuvieron otro momento alto cuando el premio al mejor largometraje animado fue para Encanto, después de que el colombiano Sebastián Yatra interpretara en vivo "Dos oruguitas", la canción en castellano de la película, paradójicamente codirigida por tres estadounidenses: Jared Bush, Byron Howard y Charise Castro Smith. Este premio confirmó el favoritismo que los miembros de la Academia suelen mostrar por los trabajos de los estudios Disney, máximos ganadores en esta categoría en la historia del Oscar.
Previsiblemente, Troy Kotsur se impuso en el rubro Mejor Actor de Reparto gracias a su trabajo en CODA: Señales del corazón, en la que interpreta a un padre sordo que debe aceptar que su hija deje el núcleo familiar para perseguir su sueño de ser cantante. "Dedico el premio a toda la comunidad de discapacitados, es nuestro momento", dijo Kotsur en lenguaje de señas, con interpretación simultánea y la platea celebrando de pie y agitando sus manos en señal de aplauso.
La japonesa Drive My Car cumplió con los pronósticos y se quedó con la estatuilla a Mejor Película Internacional. La película dirigida por Ryusuke Hamaguchi está basada muy libremente en tres relatos breves del libro Hombres sin mujeres, de Haruki Murakami.
La ganadora del Oscar al Mejor Documental resultó Summer of Soul, película que recupera el recuerdo del legendario Festival Cultural de Harlem, realizado en 1969 que celebró la música y la cultura afroamericanas, y promovió el orgullo y la unidad de la misma.