La semana pasada, la lista que encabezaban Virginia Solórzano y Gabriela Buabse, se impuso en las elecciones del Colegio de Magistrados y Funcionarios de Salta. De esa manera, y coincidiendo con el Mes de la Mujer, por primera vez en sus 57 años de historia, dicha institución será presidida por dos mujeres.
Quien lo presidirá, Solórzano, es jueza del Tribunal de Impugnación, mientras que la secundará la actual directora del Centro de Investigaciones Fiscales (CIF), la fiscala Buabse. Y si bien ambas integraban la lista oficialista Integridad y Compromiso, reconocen que tuvieron que dar más de una batalla para llegar a donde están y que aún queda mucho recorrido para lograr romper con las ataduras patriarcales que dominan al Poder Judicial en Salta y el país.
Salta/12 entrevistó a la nueva presidenta del Colegio que reúne a los jueces, juezas, fiscales y funcionarios judiciales de la provincia, cuyo mandato se extenderá hasta 2025.
-¿Cómo lograron conformar una lista encabezada por dos mujeres en un ámbito como el de la justicia?
-Con Gabi (por Gabriela Buabse) venimos trabajando en el consejo directivo del Colegio hace muchos años, y como las decisiones allí se toman en conjunto, a la que sumamos el requerimiento de socios y allegados, nos animamos a conformar esta lista que terminó rompiendo con una historia de 57 años de mandatos de varones.
Fue muy importante para nosotras en este momento histórico de la lucha de las mujeres por alcanzar la paridad.
-¿Cuál es el desafío que tienen por delante como mujeres para romper con el techo de cristal que se ve claramente en la Justicia para que las mujeres puedan arribar a ocupar lugares de poder?
-Lamentablemente es así, es una realidad que se vive dentro del ámbito. Yo formo parte de un tribunal que está compuesto por cuatro Salas de tres jueces cada una, es decir, son 12 jueces en total y en este momento soy la única mujer jueza que lo integra.
Hay cuatro vacantes que podrían ser consideradas para incrementar el cupo, y a la hora de remitir los pliegos del concurso, se decidió enviar el de una mujer más. Es decir que eventualmente seremos 2 mujeres y 10 hombres en el tribunal, cuando tenemos muchas juezas de primera instancia y funcionarias también muy capaces para ocupar un lugar así. Por lo que no se puede negar que es una realidad, que nos cuesta llegar sobre todo a ocupar lugares en las instancias superiores y también en algunos fueros como el Penal. Siempre en los fueros de Familia, que parece son los lugares que debemos ocupar por eso del rol de madre, es donde más mujeres llegan. Así como en el Civil, pero los otros están reservados para varones.
Así que el desafío será llevar conciencia de que esta es una realidad, y que la mujer ocupa muchos puestos de trabajo con responsabilidad, que se capacita y labura duramente como para tener las mismas oportunidades que los varones de acceder a cargos de mayor poder.
-¿Qué visión tiene de la justicia hoy? Sobre todo en un Poder tan criticado por la sociedad
-La Justicia siempre es criticada socialmente por el rol en el que estamos. El justiciable nos pone a nosotros sus conflictos, y en los conflictos, en general, no hay solo una parte, sino dos o más. Por lo que sea cual fuere la decisión, siempre habrá alguien que queda descontento.
Pero más allá de eso, tenemos que velar por una justicia que vaya de cara al justiciable y que sea más comunicativa. Somos muchos los jueces que trabajamos denodadamente por tratar que esto salga adelante, y la gran mayoría somos independientes. Y eso lo tenemos que mostrar, hacer ver, algo que la sociedad no ve, sino que le llega el error judicial, cuando en la gran mayoría de los casos no es así. La gran mayoría buscamos que el más vulnerable tenga acceso a la justicia.
Ese es otro de los grandes desafíos que tenemos, hacerle ver a la sociedad que verdaderamente somos un poder independiente y que trabaja día a día para eso.
-Hay vastos sectores que piden una reforma profunda de la Justicia, y que consideran que hay que comenzar por organismos como la Corte Suprema
-Es difícil opinar. La Corte es una cabeza de poder y como todo podrá tener errores en algunas decisiones, pero hay mecanismos que se tienen que poner en marcha si uno quiere renovar, y para eso es la sociedad la que se tiene que poner de acuerdo y ver qué y cuál reforma quiere.
La Corte en este momento necesita en principio más integrantes y sobre todo un componente femenino con más presencia, ya que no quedaron mujeres, y una es muy poco.
Pero también hay mecanismos en donde deben funcionar distinto. Son solamente cinco personas para resolver una gran cantidad de conflictos y que cada vez se van sumando más. Por lo que considero que deberían estar para las cuestiones más importantes de asuntos constitucionales.
-¿Qué opina de los mecanismos para la designación de juezas y jueces?
-En general el Consejo de la Magistratura y el sistema de concursos es el mejor sistema. Haber pasado de que los amigos del gobernador sean los elegidos, a tener la posibilidad de participar es un gran avance. Ahora bien, tenemos que tener en cuenta que ese sistema de concursos tiene que perfeccionarse. Dar la posibilidad de que haya personas que toman y evalúan los exámenes que sean técnicos, y que el Consejo pueda evaluar lo que es una cuestión de perfil.
La composición del Consejo de la Magistratura tiene abogados y personas que no lo son y devienen de la política. Entonces, a la hora de evaluar, deberían ser personas meramente con conocimiento técnico, para luego pasar a la entrevista de perfil de qué juez, defensor o fiscal queremos, que puede ser abordada por quienes componen el Consejo y que no necesariamente sean juristas.
El mismo gobernador lo dijo y reconoció en su discurso de apertura de sesiones, que esto puede ser algo a evaluar más adelante. Y el Colegio de Magistrados tiene esa posibilidad, que incluye la voz de todos los operadores y por lo tanto una voz autorizada para decir cómo queremos conformar ese Consejo.
-¿Y con respecto a la elección de jueces de Corte de la provincia? ¿usted es partidaria de que la terna la elija el gobernador?
-Bueno, el sistema sigue siendo el que se utilizó históricamente, y con una reforma de la Constitución tan actual, creo que pretender una nueva reforma no tendría sentido. Aunque se podría haber cambiado la elección. En Chaco, por ejemplo, esa designación se hace a través del Consejo de la Magistratura también.
Es un sistema posible, pero en mi opinión personal siempre creo que el concurso es más beneficioso. Aunque repito que no creo conveniente plantear una nueva reforma a tan poco de haber sancionado un nueva.
-¿Cuál va a ser el rasgo distintivo de su gestión?
-Bueno, nosotras vamos por un Colegio independiente, que quiere defender a sus socios y que integre a todos y todas, sin divisiones a pesar de las elecciones, que es parte de la vida democrática de la institución.
Hoy tenemos que estar todos juntos trabajando para que el Colegio sea la casa de todos, desde el abogado auxiliar hasta los jueces jubilados.