La semana pasada, el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, lanzó públicamente un dato que alarmó a más de uno: la ciudad de Salta es la única capital del país que aún no está conectada a la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO) a pesar de que las líneas corren a través de las rutas nacionales 16, 40 y 81, y que ya abastecen a una gran parte del territorio provincial.

Esa alerta, que para el referente nacional es una pauta más de que aún falta federalismo en cuanto a las políticas públicas, también dejó al descubierto el desinterés por parte de las autoridades provinciales, presentes y pasadas, para avanzar en materia de conectividad, ya que la REFEFO hace años que surca la provincia y uno de sus nodos está a muy corta distancia de la ciudad con más habitantes de Salta, en Cobos. Pero para ello, hacía falta gestionar las inversiones y solucionar algunos problemas con la empresa que debía transportar el cableado.

Es por eso que enviaron al ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo, Ricardo Villada, a reunirse en Buenos Aires con el presidente de ARSAT, Matías Tombolini, y el titular de Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), Claudio Ambrosini, para ponerle fecha al inicio de las obras que completen el tramo faltante y que le permitirá a Salta, y otras localidades de sus alrededores, brindar ese servicio de internet, tanto a las instituciones públicas como a las prestadoras minoristas de servicios TIC (tecnologías de la información y la comunicación) para mejorar la oferta y la calidad en el servicio prestado.

Tras el encuentro con las autoridades nacionales, Villada adelantó que se llevaba el compromiso de que las obras comenzarían en mayo y que se calculaba que podían llevar alrededor de 18 meses.

Salta/12 consultó a uno de los directores del ENACOM, el salteño Gonzalo Quilodrán, sobre los motivos del retraso que llevaron a Salta a ser la única ciudad no conectada a la Red, y sobre cómo se concretará dicha obra y con qué inversiones.

Quilodrán recordó que apenas iniciada su gestión presentó un proyecto “igual” al que hoy se maneja, pero que quedó postergado primero ante las dificultades que presentaron las restricciones por la pandemia de coronavirus, luego por algunos inconvenientes con quien debía transportar el cableado, y por último, porque no llegaron las inversiones internacionales vía Banco Interamericano de Desarrollo que se habían gestionado desde ARSAT. Por eso, en esta oportunidad, decidieron hacerlo con fondos propios del ENACOM y están calculando que costará alrededor de $800 millones.

“Es el mismo proyecto, que ahora impulsó Sergio (Massa)”, contó el funcionario y detalló que son 244 kilómetros de tendido, en algunos tramos con fibra nueva y en otros, a reparar o cambiar. Aclaró que hay una gran infraestructura ya tendida “pero que aún no está iluminada”, es decir, no está funcionando porque faltan algunos detalles.

El tendido que se utilizará es el que ingresa a la provincia a través de la ruta 16, que llega desde Corrientes a Metán. Desde allí, aprovecharán para realizar un tramo de fibra nueva hasta Rosario de La Frontera hacia el sur, “y desde la 9/34 hasta Cobos también con fibra nueva”.

En esa localidad ubicada sobre la autopista de ingreso a la ciudad de Salta ya existe un Nodo de ARSAT dispuesto desde hace años, que permite continuar hasta la capital con un tramo que también ya está instalado en las dos vías de esa ruta (ex Aunor), aunque hay que revisarlo y hacerle arreglos. Y el punto final de esa Red Federal de Fibra Óptica termina en el Centro Cívico Municipal (CCM).

“En el medio, se fueron incorporando una serie de pequeñas localidades en el camino para aprovechar ese tendido e iluminarlas también con conectividad”, agregó Quilodrán. Ahí se incluyen Rosario de La Frontera, Metán, Metán Viejo y otros poblados hasta llegar a Cobos.

También explicó que la demora en la conexión fue porque había un convenio con Transener, la Compañía de Transporte de Energía Eléctrica en Alta Tensión, que debía transportar también la fibra a través de sus instalaciones, pero que luego no quiso hacerse cargo de un seguro de caución para transportar la fibra por temor a tener problemas a futuro, “y ahí hubo un lío de abogados que duró años hasta que decidimos que vamos a tender fibra nueva bajo tierra por todo el tramo de la 9/34 sin depender de nadie más”.

Otro de los inconvenientes, reconoció el integrante del ENACOM, fue que a las dos gestiones gubernamentales, la de Juan Manuel Urtubey y la de Gustavo Sáenz, “les costó entender para qué servía esta obra y cómo beneficiaría a la provincia”. “Hasta que por suerte hubo entendimiento en avanzar y la provincia comenzó a colaborar y gestionar”, añadió.

Contó que toda esa infraestructura permitirá que a los megas que ya tienen y ofrecen las empresas privadas, se sumará el gran volumen que traerá esta conexión de ARSAT, generando que los proveedores locales “puedan comprar más megas y mejorar su servicio para los usuarios”. “Equilibrar el mercado a la baja”, porque se suma un nuevo oferente y rompe con los monopolios y oligopolios, y mejorar las prestaciones en el sistema público provincial.

Quilodrán adelantó a este medio que a partir del 5 de abril el ENACOM comenzará a sesionar de manera federal, es decir, rotarán por las distintas capitales del país, y que la primera reunión será en La Pampa. Allí se presentarían dos proyectos muy importantes para el interior de Salta en la inclusión de nuevos megas a través de la REFEFO.

En Salta tenemos obras en 19 de los 23 departamentos”, sostuvo el director del organismo nacional para demostrar que se está trabajando en la provincia, y agregó que próximamente saldrán nuevos proyectos para los cuatro restantes. Subrayó también que la Red Federal transita por las tres rutas nacionales por todo el territorio provincial, la 16, la 40 y la 81.

Quilodrán dijo que por eso los proyectos existentes en la Puna salteña, tanto para la minería como para la instalación de centros de investigación espacial tienen conexión a través del Nodo instalado en San Antonio de los Cobres, “todo eso ya está iluminado, al igual que la 16 y la 81”, y que hoy disfrutan de una muy buena conexión “con fibra hasta su hogar”, localidades como Cachi, Payogasta, Molinos, Seclantás, Angastaco y La Poma gracias a ese recorrido que hace la REFEFO por la ruta 40.