Veinte copias del currículum, me cuenta Laura que trajo; está delante mío en la cola de tres cuadras que va y vuelve tres veces sobre las calles aledañas al predio de La Rural.
Lo primero que me llama la atención al llegar es la cantidad de gente que hay en la esquina de Avenida Sarmiento y Santa Fe. Cuando logro cruzar veo tres colas, no son para ningún recital ni para sacar una entrada. Prácticamente conformadas en su totalidad por jóvenes de entre 18 y 25 años: son más de tres mil chicos por hora haciendo la cola (una hora y media me llevó hacer la cola entera para ingresar).
¿Éxito total o fracaso rotundo?
Cuando logro ingresar a la Rural comienzo a buscar en el mapa los stands de empresas afines a mi título. Para mi agrado, todos me dicen que me buscan y que no importa si tengo experiencia. Esto contrasta con la realidad que se ve en las páginas y aplicaciones de bolsas laborales en la que el 80 por ciento de las ofertas piden secundario completo, tener entre veinte y treinta años y -el gran dilema- los dos años de experiencia. Suena como algo nada del otro mundo salvo por el dato anterior, que el 80 por ciento de estas ofertas nos piden exactamente los mismos requisitos. Expo joven se vuelve de pronto una luz de esperanza en esta búsqueda laboral, ahora no necesitamos que Bumeran o ZonaJobs vengan a salvarnos.
Fuera de mi experiencia, observando a los demás me di cuenta cómo en el momento en el que decían “Buscamos Técnicos electrónicos o en informática”, “Buscamos ingenieros industriales” muchos, la mayoría, de los chicos, se iban al instante.
¿Los stands más populares? Quitando los de Zona Jobs, MercadoLibre y todos los que tenían juegos o repartían algo de comida, los más convocantes fueron Mc Donald, Mostaza, Wendy’s-KFC y Almacén de Pizzas. Viendo todo esto, la pregunta que me surge es por qué una persona hace hora y media de cola para que las únicas ofertas laborales que le tengan sean esas.
Pero ¡ojo! porque también puede ir al stand de Educación IT o alguno de todos los que ofrecen educación privada de calidad para ser ¿capacitados?
Así una feria de ofertas laborales se convierte para estos chicos en una especie de programa televisivo en el que participan de concurso en concurso para ganarse un descuento de tres mil pesos en Educación IT o un premio en Bumeran, Claro, MercadoLibre.
¿Te dejo mi CV?
Esa pregunta la escuché todo el día.
¿La respuesta? Sí, podés dejarlo, pero si lo mandas a este mail es más rápido.
En algunos stands ni siquiera te los recibían. ¿Cuál es la diferencia entre hacer una hora y media de cola para tener un correo a dónde enviar un mail, o bajarse cualquier aplicación y hacerlo desde la comodidad de tu casa (recordemos que la temperatura máxima de fue de 16º)? Es la respuesta que me gustaría darles.
Hay un hecho que no se puede ignorar: somos más de tres mil chicos por hora entre las 10.30 y las 18 que no tenemos trabajo. Fuimos a buscarlo a la Expo. Nos llevamos una montaña de folletos.
* Testimonio de un joven que fue a buscar trabajo publicado por Diario Z. Especial para Página/12.