El colectivo de cineastas le respondió este lunes al presidente del INCAA, Luis Puenzo, después de que extensa entrevista que dio en AM750 donde el por ahora funcionario habló por primera vez después de la protesta y posterior brutal represión en las oficinas del instituto. Aseguró que todavía no le pidieron la renuncia, y apuntó a que su partida sería "tirarse un tiro en el pie", ya que el problema lo excede, y tiene que ver con el corto presupuesto.
"Puenzo cuenta la mitad de las cosas. Hay muchos temas del Instituto que no venían funcionando bien", señaló, también en diálogo con AM750 Juan Mascaró, presidente de Documentalistas Argentinos (DOCA).
Y agregó: "Formo parte del Consejo Asesor, que es un órgano de cogobierno por ley, que está hoy suspendido en su actividad. Literalmente, está paralizado. Tardó dos años en ponerlo en funciones. Lo hizo recién en octubre del año pasado. Y deberíamos reunirnos una vez al mes y en todo este tiempo lo hicimos solo tres veces".
La aclaración tiene que ver con una queja central: la falta de diálogo. "Hubo una enorme falta de diálogo. Durante un año no recibió a nadie. Más tarde, hubo diálogo. Pero es una persona muy difícil para el diálogo. Es una persona inamovible en su postura. Él estaba impugnando la legitimidad del Consejo para rechazar decisiones".
De espalda a la mayoría
Sin embargo, la crítica más potente contra Puenzo tiene que ver en cómo el director de cine "administra ese fondo flaco que hoy tenemos".
"Nosotros no tenemos un planteo personal. No es una crítica a la persona. Es una crítica a las políticas públicas que él en parte representa. Entendemos que administró en contra de los intereses de la mayoría, concentrando aún más la producción", apuntó.
Y dijo: "Los otros temas, como el fondo de fomento, por supuesto, dependen de los diputados y el Gobierno. Pero ahí también pensamos que hizo poca campaña pública en torno a esto. Fue más lo que habló antes de ser funcionario que después".
