Los transportistas de cereales que habían iniciado el lunes un paro en todo el país en medio de la cosecha gruesa llegaron a un acuerdo a última hora del jueves y levantaron la medida de fuerza.

La Federación de Transportadores Argentinos (Fetra) comunicó que en las reuniones que mantuvieron en el ámbito del Ministerio de Transporte de la Nación, se arribó a un acuerdo que permitió levantar las medidas de fuerza.

El acuerdo incluyó la actualización tarifaria con un aumento del 20%, aplicada de forma inmediata. En la primera quincena del mes de mayo habrá una próxima reunión de la mesa de negociación participativa a los efectos de revisar el número. También se espera la reglamentación de una cláusula gatillo con el fin de lograr una convocatoria inmediata ante los futuros aumentos.

Otro de los conflictos que motivaba el reclamo de los transportistas, además de la falta de actualización tarifaria por parte de los dadores de carga, era el faltante de gasoil en distintos puntos del país. En ese sentido, la Secretaría de Energía informó a las autoridades del Ministerio de Transporte su compromiso de solucionar el problema de abastecimiento.

Otros de los ítems que permitieron destrabar el paro fue la creación de un Comité de Resolución de Conflictos para generar espacios de diálogo entre dadores de carga y transportistas, cuando existan problemas para acordar tarifas.

Por otro lado, se resolvió crear una Mesa del Transporte del Agro en el marco del Ministerio de Transporte de la Nación, con el fin de gestionar las distintas problemáticas del sector, como inseguridad, infraestructura y abusos de posición dominante por parte de los dadores de cargas, según indicó el parte emitido por Fetra. 

La protesta se extendió por cuatro días  y paralizó el transporte de la cosecha gruesa a los puertos. El sector agroexportador informó que por motivo de la medida de fuerza habían quedado parados embarques de granos por unos US$1000 millones. 

Una de las zonas más afectadas fue el Gran Rosario, donde se concentra la gran mayoría de los puertos privados integrados. Estos días pudieron verse concentraciones a la vera de la ruta y las playas de estacionamiento de camiones de las grandes empresas que estaban vacías por el menor ingreso de vehículos.

Los dueños de camiones fueron a la medida de fuerza al no encontrar eco para revisar tarifas después de los importantes aumentos en el precio del gasoil de febrero y marzo, que lo llevaron a entre 150 y 160 pesos el litro. Para paliar esa pérdida, reclamaban una recomposición de los valores de transportes que habían sido actualizados en febrero pasado, cuando el combustible de los camiones costaba menos de 110 pesos. 

El pedido inicial fue un aumento de 30% sobre la tarifa, que en ese momento estaba en 3.432,45 pesos la tonelada transportada. Finalmente se acordó el 20% para volver a poner a trabajar los camiones, y en mayo se volverá a discutir.

Las negociaciones las llevaron adelante de forma virtual las cámaras de transportistas y las entidades del campo, como principales dadores de carga. El Ministerio de Transporte brindó el ámbito de negociación y apuró un acuerdo.