Entre toda la simbología que rodea al mundo de la marihuana, hay un número que se repite entre quienes dominan la jerga: el 420. La tradición en torno a este número, que refiere a un día y un horario, nació con un grupo de estudiantes de California (EEUU) y actualmente es conocida, y practicada, casi en todo el mundo.
Quienes se atribuyen la creación de este término son The Waldos, un grupo de amigos y estudiantes californianos que en 1971 utilizaron el término "4:20" en relación con un plan para buscar un cultivo de cannabis abandonado, basado en un mapa del tesoro: fijaron exactamente las 4:20 PM como horario de salida para dicha mítica excursión.
Así, con el tiempo, el término “cuatro veinte” (“four-twenty” en inglés) pasó a ser parte del vocabulario de este grupo de amigos para referirse a la marihuana. Posteriormente se extendió a sus amigos, conocidos y hasta amigos de sus amigos. Así, cada vez más gente fue usando el término “420”.
Según señala un artículo de BBC.com, sólo de boca en boca el término llegó a la banda de culto Grateful Dead y con ellos a sus fanáticos: los deadheads. Fue gracias a eso que en 1990 Steve Bloom, editor de High Times (una publicación de actualidad cannábica) se cruzó con la explicación en un flyer de la banda y el 420 comenzó a usarse dentro del equipo de la revista, haciéndose cada vez más popular.
Con el tiempo surgieron varias versiones sobre el nacimiento de esta simbología y otros grupos se atribuyeron la creación de lo que hoy ya es una leyenda. Sin embargo, The Waldos aseguran que fueron ellos los protagonistas y creadores del significado y que son los únicos que cuentan con pruebas.
“The Waldos son los únicos con múltiples pruebas de evidencia física del uso más antiguo del término '420'. La historia y prueba de The Waldos del origen del '420' ha sido investigada y verificada por numerosas organizaciones de noticias periodísticas creíbles. The Waldos son los verdaderos creadores del término 420”, dice su página web.
El 420 pasó de ser un horario para convertirse en una fecha: el 4 de abril, que en inglés se expresa 4/20, se volvió la fecha emblema del consumo de marihuana y actualmente ese día se realizan marchas en distintas ciudades del mundo para visibilizar a la comunidad de consumidores o pedir por la legalización del cannabis.
¿Está penado tener plantas de marihuana en Argentina?
En Argentina la venta y posesión de cannabis y otras sustancias es ilegal, según la Ley 23.737 y se castiga con una pena que va de 4 a 15 años de prisión.
El artículo 5º sostiene que “será reprimido con prisión de cuatro a 15 años” quien “siembre o cultive plantas o guarde semillas, precursores químicos o cualquier otra materia prima para producir o fabricar estupefacientes, o elementos destinados a tales fines”.
Y luego aclara: “Cuando por la escasa cantidad sembrada o cultivada y demás circunstancias, surja inequívocamente que ella está destinada a obtener estupefacientes para consumo personal, la pena será de un mes a dos años de prisión”.
Sin embargo, en 2020 Alberto Fernández reglamentó la ley de cannabis medicinal (27.350), que contempla el autocultivo en uno de sus artículos y en el marco de un Registro Nacional. De esta forma surgió el “Registro del Programa de Cannabis” (REPROCANN).
En la web del Ministerio de Salud de la Nación se explica que el REPROCANN “es una base de datos diseñada para poder registrar a aquellas personas que cuenten con las condiciones para acceder a un cultivo controlado de la planta de Cannabis, con fines de tratamiento medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor”.
Así, con la extensión de un “certificado de cultivo autorizado por el Ministerio de Salud de la Nación”, las personas quedan autorizadas a tener hasta 9 plantas florecidas, hasta 6 metros cuadrados cultivados en interior y hasta 15 metros cuadrados en exterior.
La autorización contempla, además de las plantas, seis frascos o 40 gramos de flores de cannabis.
Cuáles son los beneficios medicinales de la planta de Cannabis
Uno de los químicos presentes en el cannabis, el CBD, posee múltiples efectos terapéuticos. Por eso la planta está autorizada para uso medicinal en varios países del mundo.
Alivia el dolor: especialmente distintos tipos de dolor crónico, incluso dolor por lesiones nerviosas.
Controla náuseas y vómitos: por esto, es muy usada para paliar los efectos de la quimioterapia para el cáncer.
Da ganas de comer: se usa en pacientes que han perdido mucho peso y para estimular el apetito.
Además, varios estudios coinciden en que el cannabis alivia síntomas en pacientes de:
Esclerosis múltiple
Enfermedad de Crohn
Enfermedad inflamatoria intestinal
Epilepsia