El gobierno de la provincia, a través del ministro de Seguridad, Jorge Lagna, definió el cambio del jefe de URII, Natalio Marciani. En su lugar quedará a cargo la actual subjefa de la URII, Betina Governatori, hasta que se designe un nuevo jefe. Hay que apuntar también que Marcelo Mendoza ex jefe policial en Baigorria, sonó para hacerse cargo de de la policía rosarina, pero surgieron algunos reparos desde la política y hay quienes lo ubican dentro de poco en la jefatura de la Unidad Regional de San Lorenzo. Ahora se escribe un nuevo capítulo en la crisis que tuvo su punto máximo el miércoles cuando por orden de un fiscal se ordenó el secuestro de los teléfonos celulares de cuatro funcionarios de la Unidad Regional II, entre ellos el de Marciani. Así por octava vez en dos años cambia el jefe de la Policía de Rosario. La jefa transitoria fue acusada por el ex comisario Gustavo Pereyra en su declaración en la causa Alvarado de haber mentido para defender a su ex jefa Ana Viglione en la causa judicial que investiga su falso testimonio, al negar haberle dado órdenes a Pereyra para investigar narcos. "Mintió y después la ascendieron" dijo Gula.
Sin embargo el propio Ministro de Seguridad Jorge Lagna despegó ambos hechos: “No es producto de lo de ayer ( por el secuestro de aparatos celulares) sino de un análisis que venimos haciendo permanentemente en esta dinámica de la inseguridad que tiene hoy una coyuntura alta”, aseguró el ministro.
En esa línea agregó que en la ciudad de Rosario, “hay dos tipos de enfoques, narcomenudeos que delincan por territorio, que se mantuvo desde 2008 en niveles altos, y el delito predatorio que también tiene picos por la situación social que vivimos”.
Con respecto a quién queda a cargo, aseguró que por ley será Betina Governatori y que siguen en la búsqueda de un nombre. “Estamos en pleno ascenso policial después de muchos años, habrá entre 4 mil y 4800 ascensos. No es fácil conseguir Jefes, no es fácil mandar y que te obedezca, se requiere de mucha capacitación y condiciones naturales de la persona”, opinó Lagna.
Marciani había asumido a mediados de enero al frente de la Unidad Regional II en reemplazo de Emilce Chimenti, quien siguió al frente de la fuerza a nivel provincial, y ese día subrayó la necesidad de "un trabajo coordinado con la Agencia de Investigación Criminal y el Ministerio Público de la Acusación".
En tanto la jefa interina, Betina Governatori había llegado a la Subjefatura de la Unidad Regional II con un extenso recorrido por la fuerza policial desde su graduación en 1999. Inició su carrera en la Comisaría 20, y luego pasó por las Comisarías 7 y 5, Relaciones Policiales de la escuela de cadetes, división Estudios, Sumarios Administrativos de Rosario, Oficina de Análisis Criminal de la URII como subjefa, en l. Secretaría de Investigación Criminal de Ministerio.
Luego fue trasladada a la Unidad Regional VI de Constitución, Comisaría 13, División Informaciones, División Personal y desde 2017 viene trabajando en Rosario, primero en la División Persona, luego como jefa de Sumarios administrativos hasta que pasó a estar a cargo de la Inspección de Zona.
Pero el pasado de Governatori fue cuestionado por el comisario retirado Gustavo Pereyra al declarar el 5 de abril pasado en la causa que investiga al narco Esteban Alvarado. "Como integrante de la Secretaría de Delitos Complejos, Betina Governatori declaró que no investigabamos hechos de drogas ni a la policías, como se le había ordenado. Es una persona que mintió en sede judicial", dijo "Gula", como se lo conoce por su seudónimo al exjefe policial.
Pereyra dijo que Governatori declaró ante sede judicial en concordancia con Andrés Ferrato y Ana Viglione (sus superiores en la secretaría de Delitos Complejos). "Dijo que nosotros no investigábamos hechos de droga ni a policías. Cosa que fue mentira, y en mérito a eso, la ascendieron vertiginosamente y ahora está como subjefa de la Unidad Regional II de Rosario. Y es una persona que mintió en sede judicial, al afirmar que no teníamos órdenes de Viglione y Ferrato para investigar hechos de droga. Y ahí en los mails que yo envié, se puede comprobar claramente lo que digo", repitió ante Rosario/12 el ex comisario.
El operativo que disparó los cambios fue ordenado por el fiscal Caterina hizo secuestrar los teléfonos móviles de numerosos oficiales de Policía para ser sometidos a peritaje. Quien ejecutó la medida fue personal de la Agencia de Control Policial y de la Agencia de Criminalidad Organizada de la Fiscalía Regional Rosario. En la investigación trabajó la secretaria de Control Policial, Raquel Cosgaya, quien analiza una presunta defraudación en el seno de la estructura policial.
Volviendo a los dichos de Lagna, el ministro de Seguridad adelantó que hoy llegarían a la ciudad los 480 patrulleros licitados. “Rosario va a tener niveles de patrulla como nunca tuvo. Es un combo de tecnología, capacitación para enfocar la violencia barrial y el delito común que más aqueja a los santafesinos y ahí necesitamos trabajar con las fuerzas federales y que los mil hombres de gendarmería lleguen cuanto antes”, dijo.
Con respecto a eso mencionó que se va a crear un regimiento, algo que se había planteado para marzo y se postergó sin fecha. “Sin embargo será una realidad. Estamos en proceso de compra, es un trabajo diario de 24 horas y con una dinámica que se expresa en el delito y que tienen que ver con la realidad social que vivimos”, remató.
Lagna habló también de los dos equipos de trabajo que buscan ponerle fin a la inseguridad en Rosario. “Hay dos tipos de intervención de las fuerzas, en el centro y macrocentro y otro 600 hombres de las fuerzas federales que están bollando en distintos barrios marcados por el mapa del delito. Nunca hablamos sobre dónde están pero hoy doy un nombre, en Villa Banana están por ejemplo”, confesó.