Con un imponente golpe ascendente de derecha, el inglés Tyson Fury venció este sábado por nocaut técnico en el 6ª round a su compatriota de origen jamaiquino Dillian Whyte y retuvo por primera vez el título de los pesados del Consejo en un combate celebrado en el estadio de Wembley en Londres ante 94 mil espectadores. Al término del mismo, Fury de 33 años de edad y un record invicto de 32 victorias (23 antes de límite) y un empate anunció su retiro de la actividad, aunque se confía que antes de fin de año pueda enfrentarse en una gran pelea unificatoria ante el ucraniano Oleksandr Usyk, el campeón de la Asociación, la Federación y la Organización.
"Le prometí a mi esposa que después de las tres peleas de Wilder iba a terminar. Quería pelear en casa, se lo debía a los fanáticos. Creo que esto es todo para mí, creo que es mi última pelea", anunció Fury a la multitud. Poco antes había resuelto el pleito a los 2 minutos y 59 segundos del sexto asalto cuando sorprendió a Whyte con un poderoso uppercut diestro que lo tendió sobre la lona.
Whyte se levantó obnubilado e hizo el esfuerzo por continuar, pero sus piernas no lo sostenían por lo que el árbitro Mark Lyson decidió retirarlo de la pelea. Luego de ser declarado ganador y de hablar para la multitud, Fury le dedicó una de sus canciones, la clásica American Pie. Desafinó, pero a nadie le importó. La gente terminó cantando y celebrando con él.
Hasta el momento de la definición, Fury (autodenominado como el Rey de los Gitanos) gobernaba estrategicamente el trámite a partir de su boxeo largo y de su doble jab de izquierda que repiquetaba permanentemente sobre el rostro de Whyte. Sin arrestos espectaculares pero con gran efectividad, hizo valer su mayor alcance ante Whyte, que nunca pudo hacer cintura y pasar por debajo de los brazos de Fury para llevar el combate a la fricción de la corta distancia.
Cuando lo logró, en el 4º round, el árbitro dos veces detuvo las acciones y apercibió por separado a ambos boxeadores por las infracciones y los golpes en la nuca en cada amarre. Pero en la 5º vuelta, Fury retomó el dominio de la pelea y preparó el terreno para la imponente definición que le permitió conseguir un nocaut impactante y cerrar su carrera de la mejor manera. Su manager, Frank Warren, cree que Fury cumplirá su palabra y no volverá a subir más a un ring, pero habrá mucho dinero para una unificación con Usyk, quien tiene pendiente la revancha con el ex campeón mundial inglés Anthony Joshua. Lo mejor será no apresurarse y esperar el curso de los acontecimientos. Llevará bastante tiempo negociar esa gran pelea.