La Justicia de Texas suspendió la ejecución de Melissa Lucio, la mexicana madre de 14 hijos acusada por la muerte de uno de ellos. Así lo decidió la Corte de Apelaciones, según lo anunció el abogado de Lucio, por cuya suerte habían reclamado en los últimos días su familia y activistas contra la pena de muerte.
Lucio fue condenada acusada de haber matado en 2007 a su hija Mariah, de dos años, en el condado de Cameron.
La niña, según la defensa, murió por las heridas internas que había sufrido por una caída accidental, dos días antes, mientras que para la fiscalía fue por los golpes de su madre.
Melissa Lucio, de 52 años, debía ser ejecutada con una inyección letal en una cárcel de Gatesville, Texas, el 27 de abril.
Su historia fue la base del documental "The State of Texas v Melissa", y movilizó a cientos de celebridades en su defensa. Sus abogados siempre dijeron que la mujer, en una condición vulnerable, pues estaba embarazada de gemelos y conmovida por la muerte de la niña, fue presionada en el interrogatorio.
