En medio de un rebrote de casos de coronavirus, China confirmó el primer caso humano conocido de la gripe aviar H3N8. Las autoridades chinas aseguran que el riesgo de transmisión entre personas es bajo.
La cepa H3N8 ha estado en circulación desde 2002, luego de aparecer en aves acuáticas norteamericanas. Ha infectado a caballos, perros y focas, pero hasta el momento no había sido detectada en humanos.
El primer caso en humanos, en la provincia china de Henan
La Comisión Nacional de Salud (CNS) de China informó el martes que un niño de cuatro años radicado en la provincia central de Henan dio positivo a la cepa tras ser hospitalizado con fiebre y otros síntomas.
"El día 24, el Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades realizó una prueba en la muestra del paciente enviada desde la provincia de Henan y el resultado fue positivo para el virus de la influenza aviar H3N8", detalló el organismo.
La familia del niño cría gallinas en casa y vive en una zona donde habitan patos silvestres, indicó la CNS en un comunicado.
El organismo aseguró que el niño fue contagiado directamente por las aves y no se determinó que la cepa "tuviera la capacidad de infectar humanos".
La Comisión agregó que las pruebas a los contactos estrechos del niño no detectaron "anomalías" y que este es un caso de "una transmisión única entre especies, y el riesgo de transmisión a gran escala es bajo".
Advertencias de la Comisión Nacional de Salud de China
La CNS advirtió a la población mantenerse lejos de aves muertas o enfermas y buscar tratamiento inmediato en casos de fiebre o síntomas respiratorios.
La gripe aviar es detectada especialmente en aves silvestres y domésticas, pero los casos de transmisión entre humanos son extremadamente raros.
Las cepas H5N1 y H7N9 de gripe aviar detectadas en 1979 y 2013 han sido responsables de la mayoría de los casos de enfermedad humana por influenza aviar, según el Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos.
En 2012, la cepa H3N8 fue señalada como responsable por la muerte de más de 160 focas en la costa noreste de Estados Unidos, luego de provocar neumonía en los animales.