Rusia puso en marcha la suspensión de su suministro de gas a Polonia y Bulgaria y los acuso de negarse a efectuar el pago en rublos. Los países afectados acusaron a Moscú de chantaje. El Kremlin además confirmó que la medida podría extenderse a otros Estados que se nieguen a pagar según lo indicado por la estatal rusa Gazprom. La Unión Europea criticó la medida y aseguró que buscarán alternativas para que el corte de suministro tenga el menor impacto posible.
Sin gas ruso
Los jefes de Estado de Bulgaria y Polonia reaccionaron a la decisión de la estatal Gazprom que hoy deja a las dos naciones sin una de sus principales fuentes de gas. El primer ministro polaco Mateusz Morawiecki acusó a Rusia de intentar chantajear a su país con el abrupto corte de suministro y aseguro que se trata de una represalia a las sanciones de Varsovia contra Moscú por la invasión a Ucrania. Morawiecki habló ante el parlamento y aseguró que Polonia no se verá intimidada. Además, dijo que el país europeo está seguro luego de años de esfuerzos por garantizar fuentes alternas de gas. El presidente polaco, Andrzej Duda, anunció que las empresas afectadas por la estatal rusa tomarán medidas legales contra Rusia por “violación de contrato”.
Bulgaria tuvo una reacción similar ante el anuncio de Gazprom. El primer ministro búlgaro, Kiril Petkov, aseguró que la decisión de Moscú es un “chantaje inaceptable” y al igual que Varsovia afirmó que se trata de una “grave violación de contrato”. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se unió al coro de disconformidad contra Rusia. "No sorprende que el Kremlin utilice combustibles fósiles para tratar de chantajearnos. Esto es algo para lo nos hemos estado preparando, en estrecha coordinación y solidaridad con los Estados miembros y los socios internacionales".
Para von der Leyen la demanda rusa de recibir rublos no está en sintonía con el 97 por ciento de los contratos firmados entre las empresas y los países europeos que establecen el dólar y el euro como moneda de pago. Además, la presidenta de la CE matizó las sanciones del Kremlin y aseguró que Polonia y Bulgaria están recibiendo gas de sus vecinos europeos. "Nos aseguraremos de que la decisión de Gazprom tenga el menor impacto posible en los consumidores europeos", afirmó. Este miércoles la CE propuso suspender por un año el cobro de aranceles aduaneros a los productos de la exrepública soviética. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aseguró que esto permitirá mantener a flote la actividad económica del país ante la invasión rusa.
Dependencia histórica
A fines de marzo el presidente ruso Vladimir Putin había adelantado que dejaría de aceptar el pago de su gas en dólares y euros. En su lugar, los europeos debían realizar el pago en rublos. Aunque en los últimos días los países europeos se habían mostrado seguros de poder cortar la dependencia del gas ruso la decisión del Kremlin de cortar el suministro a Polonia y Bulgaria tomó por sorpresa al occidente europeo.
Según datos de la Agencia Europea para la Cooperación de Reguladores de Energía (ACER), en 14 países europeos la dependencia al gas ruso supera el 50 por ciento. En Finlandia, Georgia y Letonia supera el 90 por ciento de las importaciones, 70 por ciento en Bulgaria, Estonia y Eslovaquia, 55 por ciento en Alemania, mientras que en Polonia es de 40 por ciento.
En Austria, la Agencia Austríaca de la Energía confirmó que en el país europeo la dependencia del gas ruso creció históricamente y hoy representa el 80 por ciento, según informó el diario local Der Standard. Con la suspensión de gas a Varsovia y a Sofía como telón de fondo, este miércoles la autoridad energética de Viena presentó un informe en el que asegura que al país alpino podría prescindir del gas ruso recién en 2030. “La Agencia de la Energía estima el consumo interno bruto en 89 teravatios hora (TWh) al año. De ellos, unos 63 TWh proceden de Rusia y 16 se importan de Noruega y otros países europeos. Una cantidad de diez TWh, hasta ahora insignificante, procede de la producción nacional”, cita el matutino. Según la autoridad energética Viena podría buscar aumentar el suministro de Noruega, o intentar un acercamiento con Argelia como lo hizo Italia en las últimas semanas.
Berlín y Viena pagan en euros
Viena también atajó rumores publicados en la agencia estatal rusa que sugerían que había aceptado realizar el pago en rublos. El canciller de Austria, Karl Nehammer, aseguró que se trata de “fake news de la propaganda rusa” y que la energética austríaca OMV seguirá pagando en euros. Alemania también reaccionó a la confusión denunciada por Austria. La portavoz del ministerio de Economía alemán, Susanne Ungrad, señaló que los contratos “se aplican y se denominan en euros y dólares”.
De acuerdo con el matutino alemán Berliner Zeitung, se trata de una modalidad según la cual las empresas europeas transfieren el dinero del pago a su cuenta en el Gazprombank y el banco ruso convierte los euros en rublos que luego transfiere a las empresas exportadoras de gas ruso. Esta modalidad de pago fue propuesta por el presidente ruso Vladimir Putin a fines de marzo luego de que el Kremlin anunció que solicitaría el pago de gas en rublos. El vocero del ejecutivo alemán, Steffen Hebestreit, señaló que en este momento el abastecimiento energético y de gas en Alemania está garantizado, aunque matizó que no puede saber lo que pasará en el futuro.
En tanto, el Kremlin alertó que otros países europeos podrían correr con la misma suerte que Polonia y Bulgaria si se niegan a realizar el pago en rublos. El vocero del gobierno ruso, Dmitri Peskov, que la decisión de Rusia es una repercusión de las sanciones occidentales que congelaron las reservas de Moscú en divisas extranjeras en bancos del exterior. Según Peskov, se trató del robo de una parte significativa de las reservas rusas y la catalogó como una “acción hostil sin precedentes”.
Rusia avanza en el Donbass
Por otra parte, el ministerio de Defensa de Ucrania informó que las tropas rusas tomaron el control de varias localidades en el este de la exrepública soviética (Jarkov y Donetsk). "Nos aguardan unas semanas extremadamente difíciles", avisó el ministro ucraniano de Defensa, Oleksiy Reznikov tras revelar que las fuerzas rusas tomaron las localidades de Zarichne y Novotoshkivske, en la provincia de Donetsk.
Rusia por su lado informó que bombardeó depósitos en Zaporiyia, hacia el sudeste del país, y destruyó una gran cantidad de armas. Sin embargo, el gobernador regional negó esta información y dijo que ningún depósito de municiones fue alcanzado por el ejército ruso. Putin en tanto se manifestó contra cualquier intervención externa por la invasión a Ucrania recibirá una respuesta fulminante de Moscú. El mandatario ruso aseguró que tienen todas las herramientas para responder.
Mientras que el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, llegó a Kiev tras su encuentro con Putin en Moscú. El representante de Naciones Unidas se reunirá este jueves con Zelenski con la intención de ampliar la ayuda humanitaria para Kiev y garantizar la evacuación de civiles en zonas de conflicto.