El hincha de Boca detenido en la noche del martes en Brasil tras realizar gestos racistas en el partido ante Corinthians, por la Copa Libertadores de América, fue liberado este miércoles tras haber pagado una multa de 3 mil reales, equivalentes a unos 600 dólares. Por su parte, el club xeneize expresó a través de un comunicado su "absoluto repudio a los gestos racistas y xenófobos de un hincha hacia los simpatizantes de Corinthians" y advirtió que "en la próxima reunión de Comisión Directiva se analizarán las medidas a implementar y las posibles sanciones a aplicar".
Leandro Germán Ponzo recuperó la libertad luego de que la jueza interviniente le dé la posibilidad de salir con el resarcimiento económico, aunque quedó imputado bajo el delito de injuria racial, que prevé entre 1 y 3 años de prisión, según informaron fuentes diplomáticas a la agencia Télam.
El fanático, de 42 años, recibió una denuncia por parte de un simpatizante del equipo brasileño que se sintió agraviado cuando lo observó gesticular imitando a un mono cuando se dirigió a sus rivales. El proceso fue seguido de cerca por el consulado argentino, que tiene un protocolo especial para asistir a argentinos con problemas legales en eventos masivos, sobre todo los partidos de fútbol, relataron las mismas fuentes diplomáticas.
Ponzo regresará al país junto con los hinchas de Mendoza que viajaron con él en el micro. "Corinthians repudia todos y cada uno de los actos de racismo y discriminación y agradece a la Policía Militar por su eficiente apoyo. Este hecho solo refuerza la importancia de nuestra lucha por un fútbol libre de odio", comunicó oficialmente el club.