Boca Juniors clasificó a los cuartos de final de la Copa de Liga al superar 2-0 a Barracas Central en La Bombonera, por la fecha 13 de la Zona B.

Con dos goles de Darío Benedetto, uno en cada etapa, el conjunto de Sebastián Battaglia se impuso al de Alfredo Berti y aguarda con expectativas la visita a Bolivia del próximo miércoles por Copa Libertadores ante Always Ready, luego de la clara derrota xeneize en Brasil ante Corinthians, por la tercera fecha de la fase de grupos.

Boca arrancó bien la noche y en tan sólo cuatro minutos se puso en ventaja con su goleador Benedetto, que anticipó a su marcador para empujar la pelota a la red tras una buena triangulación entre el peruano Advíncula, el paraguayo Romero y "Pol" Fernández, quien desbordó por la derecha, frenó e hizo pasar de largo a Dylan Glaby antes de su centro al área.

De inmediato, Neri Bandiera lo empató, pero el VAR advirtió al árbitro Fernando Espinoza, quien revisó la jugada y sancionó un offside tras el desvío de la pelota en Nicolás Ferreyra.

El equipo de Battaglia jugaba mal y, con poquito, Barracas generaba cierto peligro en el arco defendido por Javier García. No obstante, antes del descanso, "Pipa" Benedetto marcó el segundo en su cuenta personal, pero fue anulado por una falta previa del colombiano Sebastián Villa, que había tocado la pelota con la mano.

De vuelta de los vestuarios, el trámite continuó siendo chato. Y pese a la diferencia de jerarquía entre ambos planteles, el juego se presentaba parejo, aunque el Guapo pudo quedarse con diez jugadores luego que el árbitro no advirtiera un evidente manotazo de Glaby en la cara de Villa.

No pasaba mucho cuando un mal despeje de un defensor visitante provocó una formidable tijera de Benedetto que dejó clavado al arquero Rodrigo Saracho y representó el segundo tanto xeneize. Un verdadero golazo.

El local pudo aumentar el resultado, pero le faltó precisión en los últimos metros ante un rival que se derrumbó con el segundo tanto y que, pese a la buena campaña tras el ascenso a Primera División -con cambio de entrenador incluido- se quedó sin chances de pasar de fase en el torneo doméstico.

Finalmente, Boca Juniors pudo volver a ganar en La Bombonera. Pero en el debe, su juego deja bastante que desear. Y el próximo miércoles jugará casi una final en Bolivia ante Always Ready para alimentar el sueño de pasar también de fase en el máximo certamen continental.