Cuando vuelva de la cumbre de la banca JP Morgan que arrancará este jueves en París, Mauricio Macri tiene planeado viajar nuevamente a Miami para dar clases en la Universidad Internacional de Florida, institución que ha frecuentado con regularidad en los últimos meses. El expresidente le pidió autorización para viajar a Julián Ercolini, el juez federal que se hizo cargo de la causa sobre el espionaje a los familiares de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan en la que Macri está procesado pero sin que nada le impida salir y volver al país.
En las últimas horas, el abogado de Macri, Pablo Lanusse, presentó un nuevo pedido para que su cliente se ausente del país. Dijo que sería entre el 10 y el 15 de mayo. Aún resta que Ercolini se pronuncie, pero es una formalidad porque el juez ya anticipó que iba a autorizar las salidas del país de Macri porque entiende que como expresidente tiene mucha actividad en el plano internacional. Macri ya venía siendo autorizado a dejar el país aún cuando la causa estaba en manos del juez Martín Bava en el juzgado federal de Dolores porque era el estándar que había establecido la Cámara Federal de Mar del Plata.
Desde hace un tiempo, Lanusse informa por reservado al juzgado el lugar al que viajará Macri para evitar filtraciones. Esa práctica quedó inaugurada cuando tuvo que pedir autorización para que el líder del PRO viajara a Italia para participar del mundial de bridge. Según dijeron a Página/12 fuentes con acceso al expediente, ahora Macri quiere ir a la Universidad Internacional de Florida para dar clases. Ya estuvo como invitado en el Centro para la Libertad Económica “Adam Smith” de esa casa de estudios que parece haber cautivado al ingeniero.
Este jueves y viernes tiene previsto participar en una cumbre sobre mercados globales que organiza la JP Morgan en París, según pudo saber este diario. Desde que empezó a ser investigado por el espionaje a las familias de los 44 submarinistas, Macri no se privó del placer de viajar: se fue a Arabia Saudita a reunirse con el príncipe gobernante, pasó por Qatar, estuvo en Chile –donde recibió la noticia de su procesamiento–, fue en avión privado a Montevideo para participar de un evento de una empresa que se dedica a los negocios offshore, anduvo por España, Italia y Estados Unidos. Allí, tuvo la oportunidad de fotografiarse con el expresidente Donald Trump.
“No puede seguir autorizándoselo sin verificar la procedencia de los documentos y destinos”, protestó la abogada querellante Valeria Carreras –que incluso pidió que apartaran a Ercolini por anticipar que iba a autorizar los pedidos de Macri para viajar siempre y cuando no variaran las condiciones en la causa--. Carreras, además, hizo dos denuncias contra Macri y el exdirector general de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Gustavo Arribas por aportar supuestamente papeles falsos para salir del país.
Arribas estuvo los últimos meses fuera del país. Volvió la semana pasada y debió presentarse ante la Comisión Bicameral de Inteligencia. No declaró porque dijo que haría su defensa ante los tribunales –en donde acumula tres procesamientos por su gestión al frente de la AFI–. Ante Ercolini –que tiene la causa del ARA San Juan y la de las bases AMBA–, el exSeñor Cinco pidió un nuevo permiso para viajar entre el 12 de mayo y el 19 de junio a Uruguay y Brasil. En ambos países viven sus hijos. El escribano –amigo de Macri– advirtió que podía tener que desplazarse hasta los Emiratos Árabes Unidos por razones de trabajo y también pidió que se lo autorice. Ya viajó en un par de oportunidades para tratar cuestiones vinculadas al mundo del fútbol.