En marzo de este año Salta/12 publicó una noticia en la que los trabajadores de la bodega El Esteco, del Grupo Peñaflor, en Cafayate, denunciaron penalmente a un capataz por malos tratos y por obligarlos a realizar trabajos en condiciones insalubres y sin respetar los protocolos covid.
En ese momento, el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines de Cafayate (SOEVA), Nelson López, relató a este medio cómo fue víctima de agresiones por parte de un empleado jerárquico de El Esteco, Daniel Guaymás, cuando se presentó a verificar lo que los trabajadores le contaban, “que los 90 cosecheros estaban descargando sobre el mismo camión a la vez y utilizando la misma escalera”, cuando el reglamento especifica que no pueden ser más de 30, “lo estaban haciendo para ahorrarse cuadrillas, entonces metían tres en una”, explicó el referente.
López finalmente, con algunos de los trabajadores como testigos, presentó una denuncia penal contra Guaymás por las agresiones físicas y verbales a las que lo sometió, y pidió que la empresa lo aparte de su cargo por ejercer maltrato laboral.
Sin embargo, a poco más de un mes de lo sucedido, los únicos apartados fueron cuatro trabajadores que tienen todos entre 19 y 27 años prestando servicios a esa empresa, mientras Guaymás permanece en su cargo.
El lunes 2 de mayo, cuando se acercaron a preguntar por su salario, estos trabajadores fueron notificados por Recursos Humanos que ya no seguirían cumpliendo funciones y que este viernes recibirían las liquidaciones en sus cuentas.
“Los despidieron sin justa causa, no tienen ningún argumento para hacerlo”, sostuvo López, quien de todas maneras consideró que por detrás está lo sucedido a finales de marzo, cuando se quejaron por sus condiciones laborales y denunciaron a su capataz, “ya venimos desde el 2015 denunciando malos tratos a la Secretaría de Trabajo y a la Justicia y lo único que pasa es esto, que echan trabajadores”, expresó. Y añadió que no son solo estos trabajadores los que están disconformes con el trato que reciben desde la bodega, pero solo algunos se animan a decirlo, “él (por Guaymás), ejerce abuso de autoridad, y Peñaflor quiere tener trabajo esclavo y no trabajadores con derechos”.
El secretario general del SOEVA sumó a la situación de despidos sin causa, que la firma no se quiere hacer cargo de los años de servicios prestados para pagar las indemnizaciones, sino que solo les están reconociendo aquellos a partir de la fecha en que Peñaflor adquirió la finca, es decir los últimos 13, cuando en todos los casos tienen más de 15 años trabajando en el mismo lugar.
Francisco Burgos, uno de los cuatro trabajadores despedidos, contó a este medio que trabaja allí desde 2003, y con sus 56 años no sabe lo que hará de aquí en adelante, “quizá volver a ofrecer mis servicios en alguna bodega como temporario”. Aunque más le preocupan sus compañeros, “porque son más jóvenes y tienen familias, yo solo tengo una hija que ya tiene 18 años”, acotó.
Pero una de las cosas que más lo enoja es que la firma “ni siquiera se quiere hacer cargo de los años que llevamos trabajando ahí”. Según contó, el ofrecimiento indemnizatorio es por los últimos 13 años trabajados, “ellos dicen que van a pagar solo desde que ellos compraron la bodega, porque antes era de otros”.
Santos López también recibió el anuncio de despido por parte de Recursos Humanos de la empresa, y no ocultó su indignación “porque protegen a los maltratadores y no a los que dejamos nuestras vidas ahí”. En este caso, prestó servicios desde 1995, “son 27 años, y me quieren reconocer 13”. Con 43 años, se mostró preocupado porque si bien aún es y se siente joven “ya es una edad difícil para conseguir nuevos trabajos”. Y contestó que no sabe qué hará a partir de ahora para sostener a su familia.
En una asamblea realizada en la sede del SOEVA, la decisión tomada por los trabajadores fue convocar al paro por tiempo indeterminado y marchar este viernes por la mañana hasta la puerta de la bodega donde cortarán el acceso y media calzada de la ruta “hasta que nos atiendan los responsables y nos den una solución”, sostuvo López.
El sindicalista aclaró que están viviendo irregularidades en la mayoría de las bodegas de los Valles Calchaquíes, “también está pasando en Domingo Hermanos, Pernod Ricard, Quara y El Porvenir”, “en todas están echando, porque esta gente se cree que todavía vivimos en la época de la colonia y que son señores feudales”, sentenció. Y alertó: “lo que están buscando es tercerizar a todos los trabajadores para no hacerse cargo de los costos; solo quieren precarizar cada vez más al trabajador”, culminó.
Fuentes cercanas a la empresa confirmaron los despidos y sostuvieron que el motivo fue “comportamiento violento”, aunque aclararon que el grupo Peñaflor no realizará ningún comentario ni descargo al respecto, “son empleados que cada vez que no están de acuerdo con una directiva, se expresan de manera violenta”, indicaron para cerrar la conversación.