La fecha 6 del torneo Federal A podría haber sido una más en el calendario antoniano. Sin embargo, la proximidad con el 2 de mayo, día del hundimiento del ARA General Belgrano enmarcada en los 40 años del conflicto de Malvinas, generó un marco único e irrepetible.

Tres fueron los homenajeados que, siendo hinchas del Juventud Antoniana, estuvieron a bordo del crucero hundido ilegalmente por fuerzas británicas. Con la presencia física de Pancho Cruz y el recuerdo vivo de Mario Vilca Condorí y Marcos Antonio Lamas, la emoción desbordó las tribunas del Estadio Padre Martearena.

Homenaje en tierra santa

Cesar Villa hizo las veces de organizador del evento. De familia “malvinera”, desde chico abrazó la causa de aquellos soldados que regresaron, y la memoria presente de aquellos que dejaron su vida en las islas: “La idea surgió porque el Centro Juventud Antoniana ya venía de hacer un homenaje, el 2 de abril, a los veteranos. Sin embargo, hacer un reconocimiento por el 2 de mayo, en conmemoración del Belgrano, realmente es distinto, no hay muchos actos así. Siempre se recuerda el 2 de abril, pero el 2 de mayo tiene una trascendencia importante porque perdimos 323 vidas en el hundimiento”, contó. 

Homenajeados en el Estadio Martearena. Imagen Deborah Valado

Villa, también simpatizante de Juventud, siente orgullo de que uno de los clubes más populares de Salta haya dado el espacio para realizar este nuevo homenaje. “Me pareció genial que se acepte la propuesta del 2 de mayo, porque tuvimos una campaña desmalvinizadora muy grande durante mucho tiempo. Y los 40 años no son una conmemoración más, sino que es el momento de pelear la recuperación de la soberanía por medio de la vía diplomática”.

En tanto, Luis “Pancho” Cruz, reconocido fanático antoniano y sobreviviente del ataque al Belgrano, se hizo presente en el estadio. Nacido en el barrio 25 de Mayo, muy cerca del santuario de la calle Lerma, después de la guerra se afincó en Buenos Aires donde trabajó casi 40 años en Obras Sanitarias. Ahora, ya jubilado, puede volver a su Salta natal con mayor facilidad, en la cual se encuentra desde hace un mes cuando fueron las conmemoraciones por el 2 de abril. “Al terminar la guerra me quedé en Buenos Aires, conseguí trabajo rápido y estuve 22 años sin venir para Salta... me costaba volver, no me imaginaba como sería, pero cuando vine, no pude dejar de hacerlo. Se extraña mucho todo”.

Pancho, como lo llaman todos, comenta: “Para mí estar en la cancha de Juventud recibiendo ese homenaje, fue algo impresionante, ver toda la tribuna, el estadio, me impactó mucho... Cuando recuerdo los días en que estuve en el crucero Belgrano, me da mucha tristeza, sobre todo por los compañeros caídos que no volvieron. Más cuando uno ve a sus familias que siempre están tristes por sus hijos”.

Otro de los presentes fue Jorge Alfredo García, presidente del Centro de Ex Combatientes de Malvinas de Salta, quien también estuvo en el Belgrano, y por pura coincidencia, comparte el sentimiento antoniano. “Fue maravilloso el homenaje que hizo Juventud Antoniana a los héroes y ex combatientes. Como Centro, en estos 40 años, nos propusimos abarcar los mayores ámbitos posibles con nuestra participación para contar lo que fue la guerra. Así que este homenaje viene muy bien para que en el mundo del deporte se conozca la historia de vida y de sacrificio que hicieron los héroes y combatientes de Malvinas”, dijo. 

Historias antonianas

El impulsor del evento, César Villa, enmarca y enlaza la causa Malvinas de forma aún mas abarcativa en cuanto a la problemática regional: “Yo soy descendiente de pueblos originarios, entonces pienso que cuando el pueblo argentino perdió Malvinas, pudo sentir lo que viven los pueblos originarios cuando no pueden recuperar la tierra. Desde ese lugar a nosotros nos atraviesa la causa Malvinas”. En este sentido, uno de los homenajeados era Mario Vilca Condorí, adolescente kolla de la comunidad Los Naranjos en Orán.

Mario, con solo 16 años, perdió la vida a bordo del Belgrano, una historia que además lo enlaza con sus otros dos hermanos que también participaron en el conflicto. Su hermano Anastacio, activo participante de la causa Malvinas, recuerda la faceta como simpatizante Santo a la distancia: “Los tres hermanos éramos hinchas de Juventud. Tanto Mario como yo nos habíamos hecho a través de las radios que se escuchaban en Orán: Radio Nacional o Radio Salta. Mi otro hermano había logrado ir a la cancha”.

El presidente Javier Russo entregando las placas recordatorias. Imagen Deborah Valado

García no deja de emocionarse al recordar los pasos dentro del campo de juego acompañando la causa Mavinas. “Yo soy de Juventud desde chico, así que cuando estaba en la cancha me retrotraía a aquellos tiempos cuando era asiduo espectador de Juventud, cuando era más joven... toda mi familia es fanática de Juventud. Entonces cuando pasamos con la bandera de los caídos y la hinchada cantaba a favor de las Malvinas… cómo explicarlo, fue un momento maravilloso”.

“A mí me tocó recibir en nombre de Marcos Antonio Lamas, porque su familia no pudo llegar. Ellos son oriundos de Campo Quijano, uno de los héroes más jóvenes, al igual que Mario Vilca Condorí, ambos tenían 16 años cuando hundieron el crucero Belgrano. Dos antonianos muy jóvenes”, comenta el presidente del Centro de ex Combatientes.

“Yo soy nacido cerca del barrio de Juventud, y todos mis amigos son del Santo. Siempre fui a la cancha, nos fuimos de punta a punta del país a ver a Juventud”, relata con orgullo y pasión Pancho Cruz, y agrega una anécdota que desborda de emoción: “Tengo una cadenita con un dije de Juventud que la mandé a hacer en el 81, y siempre la tuve. Esa cadenita la llevé a Malvinas, me acompañó en los difíciles momentos... por eso la cuido como oro”.


El fútbol como multiplicador

Yo creo que el fútbol tiene la obligación de hacer este tipo de cosas, porque cuando nosotros llevamos un chico al club, nos estamos haciendo cargo de su educación, los clubes son un lugar de contención. Por eso se pide por 'los derechos formativos' de los chicos cuando hay una venta, y estos homenajes, estas acciones, son parte de su formación”, comenta César Villa, quien continúa amplificando la causa Malvinas en todos los ámbitos posibles.

En tanto que Jorge Alfredo García amplía e historiza la tarea de concientización llevada adelante: “Como presidente del Centro de ex Combatientes, asumí el compromiso de seguir luchando el tema Malvinas por nuestros derechos. Participo desde el año 87 que soy socio fundador, y hemos armado una estructura para el bienestar para los veteranos. Tenemos la satisfacción, entre comillas, de decir que en Salta ningún veterano se ha suicidado, precisamente por el trabajo que hicimos, inclusive siendo muy jóvenes y bastante inexpertos. Y este año es especial, porque a lo largo de estos 40 años trabajamos muy fuerte”.

“En la provincia de Salta el tema siempre está vigente por la labor que hicimos difundiendo la causa. Cada vez la gente conoce más y comienza a enterarse la verdadera historia, que no es la que trataron de imponer los primeros años, ahora hablamos los protagonistas directos de la guerra. Y en este sentido, el fútbol es muy positivo para hacer visible la causa Malvinas, y más tratándose de una institución señera de tantos años y con tanta raigambre en lo provincial como es Juventud Antoniana”, subraya García.

“Tengo programado reunirme con los presidentes de los otros clubes de la provincia para que repliquen el homenaje, porque no circunscribo el deporte al color de una sola camiseta”, comenta Villa, a lo que García agrega en este sentido: “Que llegue el mensaje malvinero a través del deporte para nosotros es muy importante”.