La portavoz de la Casa Blanca de los Estados Unidos, Jen Psaki, aseguró este lunes que existe la posibilidad de una "prohibición a nivel nacional" del aborto legal si finalmente se revierte la protección jurídica a este derecho, tras la filtración del documento de la Corte Suprema contra el reconocido fallo "Roe vs. Wade".

"Creemos que hay un riesgo serio", explicó la funcionaria durante su conferencia de prensa diaria, en respuesta a una pregunta sobre las declaraciones del líder de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell, quien aludió a esa posibilidad en una entrevista con un diario nacional.

También se conoció que Misisipi, uno de los 13 estados republicanos, ya tiene leyes preparadas para entrar en vigor en el caso de que el Supremo desproteja la interrupción legal del embarazo. El estado vetaría todos los abortos, salvo que haya habido una violación o la vida de la madre esté en peligro.

En Luisiana, los legisladores republicanos propusieron una ley que calificaría el aborto de "homicidio", lo que permitiría a las autoridades locales perseguir legalmente a las mujeres que interrumpieran su embarazo.

Igualmente, la portavoz Psaki indicó que, según las últimas encuestas, cerca de un tercio de los estadounidenses están en contra de revocar la protección del aborto, que afectaría principalmente a las mujeres más humildes y las de color, ya que son ellas las que más requieren este procedimiento.

Por otro lado, el diario The New York Times publicó un informe en el que sostiene que varios senadores republicanos están discutiendo planes para prohibir el aborto a partir de un número determinado de semanas de gestación, entre 6 y 20.

Este miércoles, el Senado estadounidense se reunirá para votar una moción para proteger el derecho al aborto. La medida fracasaría ya que los demócratas no cuentan con los 60 votos que harían falta para aprobarla.

El martes pasado, la revista Político publicó un borrador de opinión mayoritaria escrito por el juez Samuel Alito en el que se planteaba la anulación de las protecciones federales garantizadas de los derechos de aborto. En el texto del magistrado, quedó planteada la anulación del fallo del caso Roe vs. Wade, que garantizó el derecho en ese país.

Por su parte, el presidente de la Corte Suprema de Estados Unidos, John Roberts, confirmó la autenticidad de la declaración y adelantó que va a iniciar una investigación respecto a la divulgación del documento. “Esta traición pretendía socavar la integridad de nuestras operaciones”, dijo. Y aseguró que la misma “no tendrá ningún éxito" y que "el trabajo de la Corte no se verá afectado de ninguna manera”.

Tras lo ocurrido, el presidente Joe Biden afirmó que su gobierno prepara una respuesta a las intenciones de la Corte de revocar el fallo que permitió el derecho al aborto. "Me preocupa mucho que vayamos, después de 50 años, a decidir que una mujer no tiene derecho a elegir", apuntó el mandatario estadounidense.