Una encuesta llevada a cabo por el Sindicato de Docentes de Catamarca (Sidca), reveló que más de 1600 docentes aducen haber sufrido malos tratos y situaciones de discriminación en la Dirección de Reconocimiento Médico.
La profesora Verónica Parodi, secretaria gremial del Sidca, señaló que “desde hace mucho tiempo nuestros afiliados vienen reclamando por situaciones de maltrato y discriminación en Reconocimiento Médico, y por ello en el período 2021 hicimos una encuesta anónima para consultar acerca de estas situaciones”.
Como conclusión de esta consulta, más de 1600 afiliados revelaron que fueron víctimas de estas conductas en las ocasiones en que debieron gestionar licencias por razones de salud.
El organismo, que depende de la Dra. Analía Leiva de Ominetti, pertenece al Ministerio de Educación de la provincia y se encarga de verificar los pedidos de licencia y otorgarlas en caso de ser necesario, estableciendo además los plazos de dichas licencias.
Parodi señaló que los problemas comenzaron en el 2021, cuando el organismo decidió continuar la atención virtual, a pesar de que la mayoría de las reparticiones públicas ya habían liberado parte de sus restricciones y permitían aforos para la presencialidad. Muchos docentes, sobre todo del interior provincial, no encontraban respuesta a sus pedidos debido a las dificultades de conectividad.
Pero una vez que se normalizó la atención, los docentes comenzaron a tener problemas de maltrato por parte de los auditores médicos. “Es una canallada orquestada y está claro que hubo una bajada de línea”, remarcó Parodi al recordar que en el 2021 se conocieron unos audios de Whatsapp, en los que se escuchaba a Analía Leiva de Ominetti dando directivas a su personal para que les dificulten los trámites de licencia por razones de salud.
Como consecuencia de ello, la intersindical docente viene pidiendo la renuncia de la funcionaria e hizo una denuncia judicial.
Por su parte el Sidca acudió también al Inadi, que tomó intervención y el pasado 2 de mayo las partes fueron convocadas a una audiencia de mediación, pero la patronal no se presentó, por lo que de ahora en más el conflicto se resolverá en la sede central del organismo, en Buenos Aires.
“Le pedimos al gobernador que tome cartas en el asunto, esto ya no da para más. La ministra (de Educación) Andrea Centurión sabe de esto, pero la decisión depende Raúl Jalil”, concluyó la dirigente gremial.