El porteño Diego Schwartzman, en una gran reacción luego de haber salvado dos match points, avanzó este martes a la segunda ronda del Masters 1000 de Roma tras imponerse sobre el serbio Miomir Kecmanovic por 6-2, 3-6 y 7-6 (3).
El Peque, ubicado en el puesto 15 del ránking mundial de la ATP, empleó dos horas y 45 minutos para doblegar a Kecmanovic (31º) en un partido que estuvo a punto de perder cuando el serbio se adelantó 5-4 en el tercer set y dispuso de dos pelotas para adueñarse del triunfo.
El argentino de 29 años y finalista en Roma en la edición 2020 (perdió ante otro serbio, Novak Djokovic), superó ese momento en el que estaba al borde de la derrota y ganó siete puntos consecutivos para adelantarse 6-5, aunque recién en el tie break logró la victoria.
Se trató del tercer triunfo del "Peque" sobre el serbio asesorado por el cordobés David Nalbandian, tras los anteriores en Roland Garros 2020 y el Argentina Open de 2021 cuando lo venció en semifinales y luego alzó el título.
Schwartzman jugará su próximo partido ante el estadounidense Marcos Girón (59º), quien eliminó al kazajo Alexander Bublik (41º) al vencerlo por 3-6, 6-4 y 6-3.
Báez y Cerúndolo
La jornada tuvo la presentación de otros dos argentinos con distinta suerte, ya que Sebastián Báez avanzó a la segunda ronda, pero Francisco Cerúndolo quedó eliminado en su debut.
Báez (37º), surgido de la clasificación y recientemente campeón en el ATP 250 de Estoril, le ganó al neerlandés Tallon Griekspoor (67º) por 6-3, 6-7 (7) y 6-2 luego de dos horas y 34 minutos de un partido jugado con mucha intensidad por ambos.
El bonaerense de 21 años, jugará su próximo encuentro ante el alemán Alexander Zverev (3º), finalista el domingo último en Madrid (perdió con el español Carlos Alcaraz) y campeón en Roma en la edición 2017.
Por su parte, Fran Cerúndolo (49º), también surgido de la clasificación, perdió en sets corridos con el estadounidense John Isner (27º) por 6-4 y 6-3 en una hora y media de juego.
Isner jugará en la próxima ronda ante el español Rafael Nadal (3º), defensor del título y máximo campeón en Roma con un récord de 10 conquistas.
El Masters 1000 de Roma se juega sobre superficie de polvo de ladrillo, reparte premios por 6 millones de euros y tuvo a tres argentinos campeones a lo largo de su historia: Guillermo Vilas en 1980, José Luis Clerc en 1981 y Alberto Mancini en 1989.
