Trabajadores de la salud y pacientes del Centro de Salud y Acción Comunitaria (CeSAC) N°21 del Barrio Carlos Mugica realizarán una protesta este miércoles para reclamar que se mantengan los puestos laborales del equipo de rehabilitación de ese centro. Según denuncian, el Gobierno porteño les informó que no les renovarán los contratos que vencen a fines de mayo, por lo que el barrio se quedaría sin el único equipo interdisciplinario de kinesiología, fonoaudiología y musicoterapia con el que cuenta para tratar pacientes con retrasos de desarrollo, retardo del lenguaje o con discapacidades motoras, entre otras problemáticas. “Son disciplinas indispensables que no queremos perder. Si nos quedamos sin ellos no tenemos derivación a otro hospital”, contó a Página/12 Luz Burgos, madre de una paciente del equipo de kinesiología.
La protesta se llevará a cabo este miércoles desde las 10 de la mañana en la puerta del CeSAC 21 ubicado en la calle Prefectura Naval al 80. Desde allí, los profesionales del centro de salud en conjunto con pacientes y familiares de pacientes marcharán hacia la sede de la Secretaría de Integración Social y Urbana, ubicada junto al Ministerio de Educación porteño, en el marco de un paro de dos horas que se llevará a cabo en el CeSAC y en un jornada en la que también se juntarán firmas "por la permanencia del Equipo de Rehabilitación del CESAC 21". Según denuncia la comunidad del barrio, los integrantes del equipo interdisciplinario contratados durante la pandemia ya habían sufrido un recorte salarial en los últimos meses y ahora les notificaron que a partir del 31 de mayo sus contratos no serán renovados.
El equipo comenzó a trabajar en julio de 2020 con derivaciones de pacientes post-covid, en su mayoría del Hospital Fernández. Sin embargo, tras el descenso en la curva de contagios, el equipo continuó trabajando con pacientes del barrio y sus problemáticas específicas. Desde personas con parálisis cerebral, con secuelas de ACV, retrasos de desarrollo, retardo del lenguaje o con discapacidades motoras, hasta otras con depresión o ansiedad, son tratados por el equipo que solo en el año 2021 realizó más de 5100 prestaciones, según indicaron en un comunicado.
"Tengo una nena con múltiples patologías y varias operaciones. En la pandemia quedamos sin terapia de kinesiología y apareció este grupo que empezó a atender pacientes que necesitaban rehabilitación", contó a este diario Burgos, cuya hija está en silla de ruedas y pasó por operaciones de cadera y escoliosis. Desde fines de 2020, su hija realiza tareas de rehabilitación con el equipo del CeSAC, único centro del barrio que cuenta con esa capacidad gracias al equipo interdisciplinario. "Ella va una vez a la semana para kinesiología, hace rehabilitación motora porque desde su operación de la cadera no puede mover la pierna. No se podía sentar en su silla por los dolores que tenía y con la rehabilitación consiguió hacerlo", señaló Burgos.
La vecina alertó que ahora "todo el barrio se quedaría sin equipo de rehabilitación, sin disciplinas indispensables que no queremos perder. Si nos quedamos sin ellos no tenemos derivación a otro hospital. Acá no tenemos hospitales y los CeSAC son necesarios, en lugar de sacarnos especialidades deberían aumentarlas". Si se confirma el cese del equipo interdisciplinaro los pacientes quedarían sin soluciones inmediatas, teniendo que buscar atención en otros lugares de la ciudad, con las complicaciones que eso implica para personas que, por ejemplo, tienen discapacidades motoras.
En este sentido, Burgos advirtió que "acá no tenemos colectivos y tampoco entran taxis, es muy difícil salir a un hospital. Entonces si tenemos tres CeSAC es necesario que tengan todo lo que tengan que tener con servicio de urgencias las 24 horas". Además del 21, en el barrio funcionan otros dos centros, el 25 y el 47, pero ninguno cuenta con un equipo de rehabilitación de este tipo, por lo que derivan pacientes de rehabilitación a ese centro. Precisamente por la gran demanda de sus servicios por parte de vecinos y vecinas del barrio, en el centro de salud comenzaron a funcionar diversos dispositivos de rehabilitación en grupos que los propios trabajadores fueron conformando en el ultimo tiempo.
Dispositivos de rehabilitación de parkinson, neurocognitivos, grupos de caminatas saludables o de baile, talleres para padres con consumo problemático, son algunos de los espacios que se perderían si se confirma el cese de los contratos a fines de mayo. "Esto empieza con el 21 y luego tendremos las mismas consecuencias en los demás CeSAC", alertó Burgos, quien contó que en el CeSAC 47 "también se había habilitado un servicio de psiquiatría durante la pandemia que llegó a tener 60 pacientes y al mes directamente lo cortaron". "No queremos que nos sigan recortando la salud", concluyó la vecina del barrio.