Ya no quedan argentinos en Roma, en una jornada muy mala para los jugadores nacionales. Ni Diego Schwartzman ni Sebastián Báez pudieron continuar con su camino en el Masters 1000 italiano tras las derrotas sufridas este miércoles.
La caída de Schwartzman resultó muy sorpresiva, ya quedó eliminado al perder en la segunda ronda con el estadounidense Marcos Girón por 6-1 y 7-6 (7-4). El Peque sintió el desgaste que había sufrido en la victoria del martes ante el serbio Miomir Kecmanovic, cuando salvó dos match points y jugó casi dos horas y media de partido.
El argentino, de 29 años y finalista en Roma en la edición de 2020 (perdió con el serbio Novak Dojkovic), no se sintió cómodo jamás sobre el polvo de ladrillo del Foro Itálico y perdió con Girón luego de una hora y 52 minutos de juego.
Con la derrota de el "Peque" no quedaron argentinos en el cuadro principal de singles, ya que más temprano Sebastián Báez también se había despedido del torneo. La revelación de la temporada luchó bien en el primer set, pero luego se fue desinflando hasta perder ante el alemán Alexander Zverev (3) por 7-6 (8-6) y 6-3 en una hora y media de juego.
El Masters 1000 de Roma se juega sobre superficie de polvo de ladrillo, repartirá premios por 6.008.725 euros y tuvo a tres argentinos campeones a lo largo de su historia: Guillermo Vilas en 1980, José Luis Clerc en 1981 y Alberto Mancini en 1989.