Un “hacker” fue detenido acusado de haber mantenido cautivo durante tres horas en una casa de la localidad bonaerense de Olivos a un hombre al que, mientras tomaba cocaína, lo amenazaba con apuñalar con un destornillador hasta que la víctima huyó.
El hombre de 35 años quedó tan traumatizado y atemorizado por la situación que la fiscalía le puso custodia policial y le ofreció ingresar al Programa de Protección de Testigos. El detenido fue identificado como Amadeo Conrado Uberti, apodado “El Hacker”, un joven de 29 años que tendría causas en trámite por estafas, hurto y tentativa de robo.
“El Hacker” fue detenido en un allanamiento de urgencia realizado en su vivienda de la calle Marconi por personal de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) de Vicente López, por orden del fiscal de ese distrito, Martín Gómez, quien lo dejó detenido acusado del delito de “privación ilegítima de la libertad agravada”.
En el domicilio se encontraron distintos elementos que podrían ser pie para “una causa mucho más grande y compleja, relacionada a otras actividades ilícitas del imputado ligadas a ciberestafas”, confiaron fuentes judiciales.
Todo empezó cuando a la víctima le presentaron a Uberti, quien lo convocó a su casa y le explicó que se dedicaba a “minar bitcoins” pero que, como tenía “problemas judiciales”, necesitaba “un cadete con vehículo” para que le vaya a comprar las “placas”.
El acusado le dijo que formaba parte de su “corporación”, que cuando lo necesitaran lo iban a llamar y le iban a decir “hacé base” para que de inmediato fuera a la casa de Olivos y le contó que trabajaba para “abogados, contadores y traperos” y le mostró un ladrillo de cocaína que le había sacado a un hombre que se había presentado en su casa para pagar una deuda.
El “día del secuestro”, Uberti segun los dichos de la víctima lo hizo dejar en la casa su billetera con documentos y lo mandó a comprar “placas de video” a distintos locales. Los comerciantes se negaron a venderles salvo que pagarán en efectivo.
Cuando llegó a la casa de Uberti, este lo sentó a hacer compras online y al darse cuenta que la víctima se quería ir se colocó un par de guantes de trabajo y con un atornillador lo amenazaba y le decía: “¿Te querés escapar? Te vas a comer una puñalada”.
Ante lo violento de la situación, la víctima agarró su celular, corrió y escapó atravesando el cristal de un ventanal de la vivienda, pidiendo auxilio hasta que fue socorrido por personal policial que custodia la quinta presidencial de Olivos, ubicada a una cuadra del hecho.