Eloïse Coussy, joven ilustradora francesa, ama la música; tanto así que “en ocasiones me vuelvo un poco monomaníaca, capaz de escuchar obsesivamente la misma canción, una y otra vez, 110 veces. Y siempre encontraré una línea, un pasaje que me ponga la piel de gallina...”. No es para menos, al repasar algunos temas arrebatadores que suenan en bucle en su equipo: Ne me quitte pas, de Jacques Brel; Hymne à l'amour, de Edith Piaf; Dance Me to the End of Love, de Leonard Cohen… Y siguen, cómo no, las firmas: del gran Charles Aznavour, por caso, con temas como Heureux avec des riens o Parce que; de Anne Sylvestre (Comment je m'appelle) o, más cerca en el calendario, de Camélia Jordana o Juliette Armanet… Artistas que, además de endulzarle los oídos a la chica Coussy, le disparan imágenes: “un flash por cada frase que, en cierta forma, condensan la letra de la canción en un dibujo”.
De eso, precisamente, trata En musique, serie en curso donde esta artista visual “interpreta” canciones que la deliran con evocadoras ilustraciones. Y las canciones “cobran vida” gracias a su pulso en este encantador homenaje que, asimismo, va acompañado por algunos versos del tema en cuestión. En pos de elevar “este tipo de poesía que, aunque no esté impresa en libros, se canta y resuena en tanta gente, nos acompaña en el día a día”.
Equipada con un bolígrafo, Éloïse Coussy garabatea sus ilustraciones a mano. Luego fotografía los bocetos antes de “llenarlos de color” digitalmente. “No quiero perder el lado ligeramente crudo que mi estilo gráfico pueda tener sobre el papel”, comenta sobre su decisión de arrancar cada pieza en forma analógica. Una manera de hacer que viene practicando desde hace ya un tiempo, en series pasadas como Tout dire, donde representa “las torpezas del amor, las palabras que se atascan, los caminos que se cruzan sin entenderse”, o Vous faites quoi dans la vie?, donde cuestiona “la tontería de querer conocer al otro preguntándole a qué se dedica; juzgar a los demás por el trabajo que ejercen, congelarlos en esa categoría”.
Nacida en Burdeos, 1991, hija de una profesora de artes plásticas y de un escultor, el dibujo la acompaña constantemente, le permite traducir pensamientos, emociones a cada rato. “No hay un solo día en el que no haga garabatos”, confirma la muchacha, encantada de las buenas repercusiones que En musique está teniendo, inclusive entre músicos como la cantautora Barbara Pravi o el rapero Gringe, que le han echado merecidas flores.