El estado de Nueva York (EEUU) presentó este miércoles una demanda contra la empresa de comercio electrónico Amazon, en la cual acusa de discriminar a las personas embarazadas y con discapacidades al negarles espacios razonablemente adaptados.
La presentación fue anunciada por la gobernadora Kathy Hochul, quien detalló en un comunicado que las leyes locales obligan a los empleadores, en caso de que se solicite, la oferta de un espacio "adaptado" para aquellos con movilidades reducidas por cuestiones físicas, ya sean discapacidades, embarazos u otro tipo de diagnósticos.
En esta línea, la División de Derechos Humanos de Nueva York sostuvo que la política de la compañía fundada por Jeff Bezos permite que los gerentes de los centros de trabajo "anulen las recomendaciones hechas" para que se tomen cuenta.
Asimismo, se denunció que, de acuerdo a la política de adaptaciones de Amazon, los empleados con discapacidades se ven obligados a tomar un permiso médico no remunerado, incluso cuando se ha identificado una acomodación razonable que podría permitir que el trabajador continuara realizando las funciones esenciales de su puesto.
"Mi Gobierno responsabilizará a cualquier empleador, independientemente de cuán grande o pequeño sea, si no trata a sus trabajadores con la dignidad y el respeto que merecen", apuntó la gobernadora Hochul.
No es la primera vez que Nueva York presenta una demanda contra este gigante: en febrero de 2021, la Fiscalía General del Estados denunció a la compañía por no tomar medidas suficientes para proteger a sus trabajadores, especialmente durante los peores momentos de la pandemia del coronavirus.
Al mismo tiempo que discrimina los derechos de sus propias trabajadoras embarazadas, Amazon acaba de posicionarse en el debate sobre el aborto al anunciar que pagará los desplazamientos de aquellas trabajadoras que quieran abortar, pero se encuentren en estados que han restringido el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.