El rey emérito Juan Carlos I volvió a España tras casi dos años de haber salido en medio de sospechas de corrupción. La visita tendrá una duración de cinco días que el exmonarca pasará en la casa de un amigo y luego viajará a Madrid para reunirse con su esposa Sofía. El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, no permitió que Juan Carlos I duerma en el palacio de Zarzuela por ser residencia oficial. El mandatario reclamó que Borbón no se haya disculpado por su comportamiento. El viaje también fue cuestionado por la ministra de Desarrollo, Ione Belarra, que aseguró que el rey emérito debe volver pero a rendir cuentas.
Un retorno cuestionado
Borbón aterrizó en el aeropuerto de Vigo, en Galicia. Viajó desde Emiratos Árabes Unidos donde fijó su residencia de forma permanente, según informó la Casa Real. El padre del rey Felipe VI fue recibido por su hija, la infanta Elena. Luego se trasladó a Sanxenxo en el auto de su amigo, Pedro Campos, presidente del Club Náutico de esa localidad en la costa gallega que este fin de semana será la sede de una regata de vela en la que participa el “Bribón” el equipo que capitaneaba el exmonarca.
Campos hospedará al rey emérito en su casa hasta el lunes tras la negativa de Sánchez de permitir que Juan Carlos I duerma en el palacio de Zarzuela por ser la sede de la jefatura de Estado. El lunes se trasladará a Madrid y tiene previsto reunirse con su esposa Sofía en Zarzuela.
Según el gobierno español, aunque Borbón fue exonerado el pasado marzo “no ha dado explicación alguna ni ha pedido disculpas a la sociedad española por su comportamiento”, según consigna el matutino madrileño El País que en su editorial de hoy planteó que "no hay ya razón legal o jurídica alguna que impida al rey emérito viajar a España, pero existe un reguero de razones de carácter ético que explican el revuelo que ha causado la noticia".
Aunque las investigaciones contra Borbón, de 84 años, fueron archivadas en marzo las revelaciones sobre el origen de su fortuna dañaron su imagen y la de la familia real española. La presidenta del partido de izquierda Podemos y actual ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, cuestionó que el exmonarca tenga impunidad y pidió que la ley sea igual para todos. “El rey emérito solo debería volver a España para rendir cuentas ante la justicia. Que la inviolabilidad le libre de ello humilla nuestra democracia. Que con la legislación actual la monarquía goce de impunidad es el problema central que plantea”, escribió en su cuenta de Twitter.
Por su parte, la ministra de Economía, Nadia Calviño, dijo que todos los ciudadanos merecen una explicación por “informaciones que son muy inquietantes” y que aparecieron en el último tiempo. Mientras que desde la oposición conservadora defendieron el viaje de Juan Carlos I. "El rey emérito no tiene causas pendientes en su país y tiene todo el derecho a visitar o a regresar a España", dijo esta semana el líder del conservador Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo.
Investigaciones a la Casa Real
En los últimos años la Casa Real española estuvo en el epicentro de múltiples escándalos: desde revelaciones sobre los orígenes de la fortuna de Juan Carlos I (1975-2014) con tres investigaciones abiertas por la Fiscalía del Tribunal Supremo español para determinar si el rey emérito cobró comisiones por la adjudicación en 2011 de un contrato a dos empresas españolas para la construcción de un tren de alta velocidad entre La Meca y Medina en Arabia Saudita.
La fiscalía finalmente concluyó que una transferencia de 100 millones de dólares realizada en 2008 por el rey de Arabia Saudita a una cuenta suiza de la cual Borbón es beneficiario fue “un regalo”.
Por otro lado, su yerno Iñaki Urdangarín fue condenado en 2018 a casi 6 años de prisión por los negocios ilegales que hizo al frente de la fundación que encabezaba. El juicio también involucró a la infanta Cristina, quien luego tuvo que pagar una multa.
Otro incidente por el que el exmonarca sí se disculpó fue por su viaje a África para cazar elefentes con su amante Corinna Larsen en 2012 durante la crisis económica. El hecho sólo fue descubierto por Borbón tuvo un accidente durante su estadía en Botsuana.
En 2014, Juan Carlos abdicó en su hijo Felipe Borbón y justificó su exilio en Abu Dabi desde agosto de 2020 en la necesidad de facilitar el trabajo a Felipe VI quien por su lado tomó decisiones para distanciarse de su padre: en marzo de 2020 renuncio a su herencia y le retiró al rey emérito su asignación anual de casi 200.000 euros. Además, en abril Felipe puso en marcha una operación de transparencia en la Casa Real y ahora tendrá que auditar sus cuentas y hacer públicos los contratos, así como hacer inventario de los regalos recibidos.