El presidente de Subterráneos de Buenos Aires (Sbase), Eduardo de Montmollin, confirmó en la Legislatura porteña que el servicio de subte continuará bajo una operación privada tras el vencimiento a fin de año del contrato de concesión de Metrovías.
El funcionario aseguró que el Gobierno de la Ciudad solicitará a los diputados una autorización para llamar a licitación nacional e internacional para la operación y el mantenimiento de las líneas de subte por 12 años, con la opción de una prórroga de tres más. Sin embargo, dijo que no enviará los pliegos de la convocatoria a la Legislatura.
"Nuestra visión es que trayendo a los mejores operadores, se va a dar el mejor servicio posible", expresó ante los diputados de las comisiones de Obras y Servicios Públicos, Presupuesto y Tránsito y Transporte. Montmollin se mostró a favor de que el servicio de transporte subterráneo permanezca bajo una gestión privada, tal como ocurre desde los 90' cuando Metrovías firmó un convenio con la Nación, que luego fue mantenido por la Ciudad cuando adoptó la administración del subte en 2013.
Tras la exposición de Montmollin, varios de los diputados de la oposición presentes en la reunión reclamaron por el envío de los pliegos de licitación a la Legislatura y también pidieron que no se descarte la posibilidad de que el servicio pueda pasar a manos estatales. La solicitud estuvo a cargo del diputado Gabriel Fuks y de la legisladora Paula Penacca, quien presentó un proyecto para que el servicio sea estatizado, al igual que el frente ECO, que también elaboró una iniciativa con la misma premisa.
El tetris del subte
El titular de Sbase dijo en la audiencia que la cantidad de personas que toman el subte pasó de unos 900.000 pasajeros por día en 2013 a 1.250.000 en 2017. Montmollin estimó que en 2019 van a utilizar el servicio unos 1.400.000 usuarios y habló de una supuesta mejora en la frecuencia que los usuarios no ven.
Al respecto, el partido AHORA Buenos Aires lanzó un juego virtual sobre las complicaciones para viajar en subte, especialmente en hora pico. Se trata de un “tetris subterráneo”, para que los jugadores deben intentar acomodar a mujeres embarazadas, niños, estudiantes, trabajadores y gente mayor en un vagón.
“La idea del juego es mostrar de una manera original e interactiva lo mal que viajamos los porteños día a día”, explicó Itaí Hagman, dirigente del espacio. “El pasaje tuvo un aumento de 682 por ciento en 6 años y sin embargo seguimos viajando mal porque se avanzó muy poco en la construcción de nuevos metros de subte que descompriman y en la frecuencia entre tren y tren”.
Recordó que a fin de año finaliza la concesión de Metrovías, lo que consideró “una oportunidad histórica de transformar este sistema de transporte y que el subte vuelva a ser estatal”. También remarcó que hace más de 15 años fue aprobada en la Legislatura la ley 670, que dispone la creación de nuevas líneas y la ampliación de las actuales.